El Gobierno venezolano ha decidido retirar la autorización previamente concedida a Brasil para que representara los intereses de Argentina en Caracas.
La medida, anunciada este sábado, se fundamenta en presuntas pruebas de que las instalaciones diplomáticas argentinas estaban siendo utilizadas para la planificación de actos terroristas contra el presidente Nicolás Maduro.
Según el comunicado oficial, la decisión responde a informes sobre el uso de las instalaciones argentinas para actividades terroristas y tentativas de magnicidio contra Maduro y la vicepresidenta Delcy Rodríguez. La revocación se produce en medio de una creciente tensión, tras denuncias de opositores asilados en la embajada argentina.
Desde la noche del viernes, se ha informado que varios policías han cercado la residencia de la embajada en Caracas. La asilada Magalli Meda ha señalado que los accesos a la residencia están bloqueados por agentes policiales, mientras que el partido opositor Vente Venezuela ha reportado que la sede diplomática está rodeada por fuerzas del régimen. Omar González, otro asilado, ha indicado que los periodistas no pueden acercarse a la embajada.
Pedro Urruchurtu, coordinador Internacional de Vente Venezuela, ha mencionado la presencia de agentes de la Policía Nacional Bolivariana y del Servicio Bolivariano de Inteligencia en el área. Además de Urruchurtu, Meda y González, los asilados incluyen a Claudia Macero, Humberto Villalobos y el exministro Fernando Martínez Mottola. Estos opositores se refugiaron en marzo tras enfrentar acusaciones de conspiración y traición por parte de la Fiscalía venezolana.
