Plan «Entornos Escolares Seguros» busca proteger a los estudiantes y fortalecer la seguridad escolar.
En un esfuerzo por mejorar la seguridad en los entornos educativos, la Policía Metropolitana de Santa Marta ha lanzado el plan «Entornos Escolares Seguros», realizando un despliegue significativo de personal y recursos. Esta iniciativa, destinada a proteger a los estudiantes y garantizar un ambiente seguro en los centros educativos, abarcó diversos establecimientos en la ciudad, incluyendo el Instituto Liceo El Pando, el Colegio María Laura, el Colegio Hugo J. Bermúdez, el Colegio Rodrigo de Bastidas y el Colegio INEM.
El Coronel Jorge Andrés Bernal Granada, comandante de la Policía Metropolitana de Santa Marta, lideró la actividad de control, que se enfocó en verificar la seguridad en las áreas externas de estos centros educativos. El plan incluyó el acompañamiento de los estudiantes durante la salida de la jornada escolar por la mañana y la entrada de la jornada por la tarde. Este acompañamiento buscó ofrecer un entorno seguro y tranquilizador para los niños, niñas y adolescentes.
La actividad contó con la participación de más de 100 uniformados pertenecientes a diversas especialidades dentro de la Policía, como el Grupo de Operaciones Especiales, la Reacción Motorizada, la Policía Comunitaria, el GAULA (Grupo de Acción Unificado por la Libertad Personal), la Policía Judicial y la Policía Carabineros. Todos estos efectivos trabajaron en coordinación con la oferta institucional de la Policía Metropolitana de Santa Marta.

En palabras del Coronel Bernal, «Con estos operativos sorpresa, que llevamos a cabo en la ciudad, también nos enfocamos en los entornos educativos para estar pendientes de nuestros jóvenes y evitar que se vean envueltos en actos incongruentes. La idea es tener un acercamiento directo y que tengan a su disposición a la Policía para informar cualquier inquietud».
Este enfoque integral del plan busca no solo fortalecer la seguridad en los alrededores de las instituciones educativas, sino también fomentar una mayor confianza y comunicación entre los estudiantes y las autoridades policiales, contribuyendo a un ambiente más seguro y armonioso para el desarrollo escolar.