Gran expectativa existe entre los colombianos pertenecientes a todos los estratos sociales, respecto a las dimensiones a las que pueda llegar el actual paro protagonizado por los transportadores de carga, quienes continúan pregonando sus conceptos con relación a los altos costos de los combustibles tales como el Acpm, lo cual se traduce –según ellos– en grandes pérdidas, y se constituye en el origen de sus reclamos, que han venido esbozando desde días atrás.
Esta situación que desde tiempos inmemoriales ha venido perjudicando a los transportadores de carga –según ellos lo pregonan– desbordó la copa de las posibles conciliaciones anunciadas desde tiempo atrás por parte del actual Gobierno.
Esta situación que se ha extendido por gran parte del territorio nacional, pone de manifiesto la necesidad de un entendimiento entre los componentes del gremio de los transportadores y el Gobierno Nacional, que entre otras cosas, a la postre es este el que deberá dar a conocer las posibles rutas para llegar a un acuerdo en el que no exista la categoría de vencedores ni vencidos.
Hay que tener en cuenta –eso sí– que la actual situación del paro de transportadores, lo cual está planeado para todo el territorio nacional, se había venido ventilando desde mucho tiempo atrás, sin que se observara un ápice de la voluntad del actual Gobierno para encontrarles una solución a la tan reiterada petición, por parte de los transportadores de carga, en el sentido de ofrecerles una salida acorde con las actuales circunstancias que avizoran un incremento en las protestas, tal como los han venido pregonando los transportadores, luego del poco interés por parte del Gobierno Nacional –según ellos– en el sentido de darle una solución lo más pronto posible a la situación que se sigue presentando en todo el territorio colombiano.
La situación tiende a agravarse teniendo en cuenta que ayer no se llegó a ningún tipo de acuerdo con el Gobierno, por lo que los bloqueos y las movilizaciones por parte de los componentes del gremio de transportadores, que están en contra del alza en el precio del Acpm, se han mantenido a nivel nacional.
Las consecuencias del paro pueden ser el desabastecimiento, la afectación del empleo y el impacto a la inflación; podría llevar a la escasez de productos locales, las empresas enfrentarán retrasos en las entregas de los productos y no tendrán movilización de carga, al momento de reactivarse la velocidad no será la misma, es como una venta perdida que no se recupera nunca, de acuerdo a la expresión de veteranos productores y transportadores duchos en la materia, con los cuales LA LIBERTAD ha intercambiado ideas.
Indagamos en vivo con varios transportadores y todos coincidieron en el incremento del costo operativo, la competencia y las tarifas estancadas, el mantenimiento de los repuestos ya que con el alza de estos, las tarifas no aumentan en la misma proporción “ahí tenemos un problema”; el sector transportador enfrenta una alta competencia y el margen de ganancia se reduce; finalmente se concluyó que el aumento de los costos de mantenimiento impactan grandemente en las posibilidades de altas ganancias entre los transportadores medianos.
De todas maneras consideramos que el diálogo y la concertación con buenas intenciones, continuarán siendo fundamentales para encontrarle una solución justa y ojalá duradera al conflicto al cual hoy hacemos referencia.