El comercio del centro histórico de Santa Marta, y en especial el de la Carrera quinta, ha llegado al límite de su paciencia con la empresa de energía AIR-E.
Los continuos cortes de suministro eléctrico, que se están dando precisamente los días sábados —cruciales para las ventas—, están afectando gravemente la economía local.
Los comerciantes denuncian que, a pesar de los supuestos “mantenimientos en redes,” las fallas persisten, generando pérdidas significativas en un momento en que cada venta cuenta.
La frustración es palpable y la comunidad exige respuestas inmediatas.
¿Hasta cuándo seguirán soportando la ineficiencia de esta nefasta empresa?