La medida, impulsada por el conflicto en Gaza, representa una pérdida de US$88,1 millones para Colombia y podría vulnerar el Tratado de Libre Comercio con Israel.
La reciente prohibición de exportaciones de carbón a Israel, decretada por el gobierno colombiano, ha generado una ola de reacciones negativas en diversos sectores económicos. Según el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, esta medida afecta el 86% del comercio total entre ambos países, dejando de percibir aproximadamente US$88,1 millones, equivalentes a 355.000 millones de pesos colombianos.
El decreto 1047 de 2024, firmado este fin de semana, prohíbe la exportación de hullas térmicas (carbón) hacia Israel en respuesta al conflicto armado que ha azotado la franja de Gaza entre Israel y el grupo Hamás. La medida se sustenta en un informe de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), que señala la devastadora cifra de 32.333 palestinos fallecidos y 1,7 millones de desplazados en 169 días de enfrentamientos.
Las exportaciones de carbón representan una parte significativa de las relaciones comerciales entre Colombia e Israel. Durante los primeros cuatro meses de 2024, las exportaciones totales hacia Israel alcanzaron los US$101,6 millones, de los cuales el 86,6% correspondió a hullas térmicas, es decir, US$88,1 millones, que equivalen a 890.734 toneladas de carbón. Estos números muestran la magnitud del impacto económico que conlleva la prohibición impuesta por el gobierno colombiano.
En 2023, las exportaciones de carbón colombiano a Israel sumaron US$446,9 millones, lo que representó el 89,5% de las exportaciones totales hacia ese país. A nivel global, Israel se posicionó como el noveno destino del carbón colombiano, con una participación del 4,6% entre enero y abril de 2024, por detrás de países como Turquía, Corea del Sur, México y China.
El decreto hace referencia a la Ley 28 de 1959, mediante la cual Colombia adoptó la Convención para la prevención y sanción del delito de genocidio, incorporada al bloque de constitucionalidad por la Corte Constitucional en la sentencia C-488 de 2009. Esta legislación ha sido utilizada para justificar la prohibición, que entró en vigor el 19 de agosto, pero que no afectará los contratos de exportación previamente firmados.
La decisión también tiene implicaciones significativas para las finanzas del país. Se espera una reducción en las regalías anuales de aproximadamente $650.000 millones, de los cuales $100.000 millones son destinados a los departamentos de La Guajira y Cesar, regiones que dependen en gran medida de la minería del carbón para su desarrollo económico.
Además, la prohibición podría entrar en conflicto con el Tratado de Libre Comercio (TLC) firmado entre Colombia e Israel en 2017, y vigente desde 2020. Algunos expertos en comercio internacional han advertido que la medida podría ser considerada antijurídica debido a la falta de fundamentos sólidos para su implementación, lo que podría llevar a su eventual nulidad.
En resumen, la prohibición de exportaciones de carbón a Israel no solo afecta gravemente las relaciones comerciales entre ambos países, sino que también plantea serias preocupaciones legales y económicas para Colombia, que deberá enfrentar las posibles repercusiones de esta decisión en el ámbito internacional.