Desde Estados Unidos, el excomandante paramilitar Salvatore Mancuso ha hecho declaraciones explosivas sobre los vínculos entre el Clan Gnecco y las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC).
En su testimonio ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), Mancuso ha detallado cómo el Clan Gnecco habría mantenido conexiones directas con los grupos paramilitares durante el conflicto armado en Colombia.
Mancuso, quien desempeñó un papel crucial como intermediario entre los paramilitares y las fuerzas públicas, afirmó que se recibieron solicitudes de todo el país, destacando las del Cesar provenientes del Clan Gnecco, específicamente de Jorge Gnecco.
Jorge Gnecco Cerchar, quien fue político y paramilitar, lideró el Bloque Norte de las AUC y tuvo un papel destacado en las autodefensas del Magdalena y La Guajira. Sin embargo, Gnecco Cerchar fue asesinado en 2001 en un ajuste de cuentas ordenado por Jorge 40, Carlos Castaño y el propio Mancuso.

Las declaraciones de Mancuso también han salpicado a Vicky Dávila, directora de la revista Semana, quien está vinculada a la familia Gnecco a través del matrimonio con uno de sus miembros. Mancuso ha afirmado que la mayoría de estos grupos de seguridad, incluidos los Gnecco, pasaron a formar parte de los Convivires.
Esta confesión representa un obstáculo para los intereses de Vicky Dávila, especialmente en su reciente intento de desafiar al presidente Gustavo Petro. Según Mancuso, las solicitudes para la creación de autodefensas no se limitaron al Cesar, sino que también provinieron de otras regiones como el Magdalena y los Montes de María.
En su declaración, Mancuso identificó a varias figuras clave en la región, incluyendo al expresidente de Fedegan, Jorge Visbal Martelo, y a otros actores políticos y empresariales que habrían solicitado la formación de autodefensas para proteger sus intereses durante el conflicto.