La violencia en el Área Metropolitana de Barranquilla sigue en aumento, impulsada por bandas criminales que compiten por el lucrativo mercado del microtráfico y las extorsiones.
En un contexto donde el negocio del narcotráfico maneja más de 130 mil millones de pesos al año, las cifras de homicidios y otros delitos no cesan.
El personero distrital, Miguel Ángel Alzate, ha manifestado su preocupación por la creciente inseguridad en la ciudad, señalando que “ha existido la negación de los hechos que nos aquejan”. En sus declaraciones, Alzate subrayó que Barranquilla ha experimentado un notable crecimiento en desarrollo y bienestar, pero también ha sido testigo del auge de bandas delincuenciales que han echado raíces profundas debido a una falta de atención adecuada por parte de las autoridades.
Hasta la fecha, se han registrado 32 homicidios en el Área Metropolitana en agosto, con Barranquilla sumando 17 asesinatos, Soledad 9, Malambo 4, Puerto Colombia 1 y Galapa 1. Estas cifras se suman a los 251 homicidios registrados en los primeros siete meses del año, reflejando un aumento en comparación con el mismo período del año anterior.
El aumento de la violencia está ligado al crecimiento y poderío de bandas criminales como Los Costeños, liderados por Jorge Eliécer Díaz Collazos alias ‘Castor’, y Los Pepes, bajo el mando de Digno Palomino. Estas bandas han logrado mantenerse activas y en conflicto constante, complicando los esfuerzos para su desarticulación.
El número de extorsiones también ha crecido alarmantemente, pasando de 415 en 2022 a 833 en 2023, mientras que los robos y atracos aumentaron en un 11.76%. Estos datos destacan la intensificación de la actividad criminal en la región.
El personero Alzate ha criticado la falta de acción efectiva por parte de la administración local, a pesar de las estrategias y planes implementados por el alcalde Alejandro Char Chaljub. Enfatizó la necesidad de una respuesta más coordinada y sostenida para abordar la inseguridad, incluyendo la creación de una Secretaría de Seguridad y Convivencia Ciudadana que centralice y coordine los esfuerzos de las diversas entidades responsables.
“Es fundamental que las estrategias de seguridad sean sostenidas y no solo reactivas a los hechos delictivos. Además, se debe ofrecer una gran oferta social a los jóvenes en barrios marginales para evitar que sean captados por las bandas criminales”, destacó Alzate.
La situación actual resalta la urgencia de implementar medidas integrales para combatir la violencia y mejorar la seguridad en Barranquilla, en un esfuerzo por restaurar la tranquilidad y el bienestar en la comunidad.