“Antes de acusar a nuestro país, lea nuestra Carta Magna”: constitucionalista Hermann Escarrá

Constitucionalista Hermann Escarra.

En medio de las recientes protestas y acusaciones sobre las elecciones presidenciales en Venezuela, el constitucionalista Hermann Escarrá ofrece una perspectiva detallada sobre el sistema electoral del país y las especulaciones que han surgido. En una entrevista, Escarrá aborda las dudas que han generado la extrema derecha y los cuestionamientos internacionales sobre el proceso electoral.

Un sistema electoral avanzado bajo un marco constitucional sólido

El sistema electoral venezolano, según Escarrá, está respaldado por un marco legal robusto y avanzado a nivel mundial. “El sistema electoral venezolano está considerado entre los más avanzados del mundo, tanto en el sentido tecnológico como por el sistema de garantías que brinda”, explica el experto. Este sistema está fundamentado en la Constitución, la Ley Orgánica del Poder Electoral y la Ley Orgánica que regula los procesos electorales. Además de los tres poderes tradicionales (Legislativo, Ejecutivo y Judicial), la Constitución venezolana de 1999 incorpora dos poderes adicionales: el Poder Moral y el Poder Electoral. Esta estructura busca garantizar la democracia y los derechos fundamentales en todos los aspectos.

Escarrá destaca que el Poder Electoral en Venezuela es completamente autónomo. No se trata de una entidad gubernamental ni de un ministerio, sino de un poder independiente, similar a los otros poderes del Estado. “El Poder Electoral no es un ministerio, no es una estructura de gobierno ni una oficina. No es un servicio público regulado por el ejecutivo, es un poder autónomo”, afirma.

Garantías y derechos bajo la Constitución de 1999

El constitucionalista subraya que la función principal del Poder Electoral es asegurar la estabilidad democrática y proteger los derechos políticos de los ciudadanos. “La democracia venezolana, nacida de la Constitución de 1999, transita del concepto de democracia representativa al de democracia participativa y ‘protagónica’”, añade Escarrá. Este cambio busca reflejar la soberanía popular en todos los aspectos del gobierno y garantizar un sistema de votación secreto, universal y directo.

Reacciones a las acusaciones de fraude y la falta de pruebas

La reciente acusación de fraude por parte de sectores ultraderechistas ha generado controversia. Escarrá aclara que, ante tales denuncias, corresponde a los acusadores presentar pruebas concretas. “Lo cierto es que un sector violento de la ultraderecha ha denunciado presunto fraude, pero sin presentar pruebas”, señala. Además, el experto destaca que los resultados certificados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) son definitivos una vez que se ha escrutado el 80% de los votos, como ocurrió el 28 de julio.

La cuestión de las actas y el papel del CNE

Escarrá discute la solicitud de algunos sectores para que el CNE publique las actas de votación, argumentando que esta demanda es inapropiada. “Es imprescindible publicar los resultados, no las actas”, afirma. Según el artículo 155 de la Ley Orgánica del Poder Electoral, el CNE debe publicar los resultados en la Gaceta Electoral dentro de los 30 días siguientes a la proclamación de los candidatos. Las actas, por su parte, están en manos de todos los partidos que participaron en las elecciones.

Reacciones internacionales y el papel del TSJ

La propuesta de una comisión internacional de verificación ha sido criticada por Escarrá, quien considera que se trata de una intromisión en los asuntos internos de Venezuela. “La de la comisión internacional de verificación me parece una iniciativa extraña”, afirma. En cuanto al papel del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), Escarrá espera que el máximo tribunal resuelva cualquier controversia basándose en la ley y los documentos presentados por los candidatos.

La situación política interna y las relaciones internacionales

Escarrá también se refiere a la situación interna de Venezuela y a las amenazas de agresión imperialista. “Siempre existe un peligro inminente de agresión imperialista”, afirma, señalando que la administración de Obama ya había calificado a Venezuela como una amenaza. En cuanto a la posición de Nicolás Maduro, Escarrá cree que el presidente debe continuar con los objetivos de la revolución bolivariana para garantizar la paz y el respeto a la Constitución.

El impacto de las elecciones estadounidenses

Finalmente, el constitucionalista reflexiona sobre el impacto de las elecciones en Estados Unidos en la política venezolana. Según Escarrá, no habrá grandes diferencias en la política exterior de Estados Unidos, independientemente de quién gane. “Ya sea que ganen los demócratas con Kamala Harris o los republicanos con Donald Trump, no habrá muchas diferencias en la política exterior estadounidense”, concluye.