Un cuartel militar en Colonia, Alemania, ha sido cerrado temporalmente tras la sospecha de que un acto de sabotaje pudo haber contaminado el suministro de agua en las instalaciones.
La decisión fue anunciada por el Ministerio de Defensa alemán luego de que se detectara una posible intrusión en el sistema de agua del cuartel de Colonia-Wahn.
Arne Collatz, portavoz del ministerio, confirmó en una rueda de prensa que las autoridades están investigando el caso, y que existen serias sospechas de que el agua potable podría haber sido comprometida. El Ejército, en coordinación con la policía, la policía militar, el Servicio Militar de Contrainteligencia (MAD) y la Seguridad Policial, está trabajando para esclarecer los hechos. Aunque Collatz no pudo proporcionar más detalles, subrayó la gravedad de la situación.
El Teniente Coronel Ulrich Fonrobert, portavoz del Ejército, declaró que el cierre del cuartel se produjo tras un «incidente» ocurrido el martes. Según Fonrobert, el Ejército considera este incidente de suma importancia y está cooperando estrechamente con diversas agencias de seguridad para garantizar la seguridad del personal.
De acuerdo con el medio «Der Spiegel», las comunicaciones internas del cuartel instaron a los soldados y al personal civil a no consumir agua potable bajo ninguna circunstancia, mientras se investigaba el posible sabotaje. Además, se ha restringido el acceso al cuartel hasta que se resuelva la situación. En el cuartel, que también sirve como base para la Fuerza Aérea por su proximidad al aeropuerto de Colonia, residen alrededor de 5.500 personas, incluyendo 1.200 civiles y 4.300 militares.
La reapertura del cuartel estaba prevista para este miércoles, a la espera de nuevos desarrollos en la investigación.
