En Colombia, el Instituto Nacional de Salud (INS) ha confirmado 87 casos de virus de oropouche (OROV), lo que ha llevado a una intensificación de la vigilancia y medidas preventivas. Según el INS, durante el primer semestre de 2024 se procesaron 1.279 muestras de fiebre por dengue, de las cuales 87 resultaron positivas para oropouche mediante pruebas PCR.
El informe del INS revela que el 94,6% de los casos se concentran en la región del Amazonas, con 68 casos en Leticia y 2 en Puerto Nariño. Además, se identificaron 2 casos en Tabatinga, Brasil (2,7%), 1 en Florencia, Caquetá (1,4%), y 1 en Guamal, Meta (1,4%). El 51,4% de los casos han sido detectados en mujeres, y del total de los casos, el 42,8% corresponde a población indígena, el 3,2% a gestantes, y el 76,2% a residentes de cabeceras municipales.
“A la fecha, solo dos casos requirieron manejo hospitalario por enfermedades de base, con evolución satisfactoria, ninguno de los casos presentó complicaciones asociadas al virus,” informó el INS. Además, se confirmó que dos de los casos fueron en mujeres embarazadas, cuyos recién nacidos no presentaron la enfermedad.
El INS indica que la propagación del virus en el Amazonas se debe a una extensión del brote que comenzó en municipios del noroccidente del estado de Amazonas en Brasil. Aunque el virus de oropouche es endémico en algunas regiones selváticas de Colombia, la preocupación principal de las autoridades se centra en la transmisión perinatal, similar a la que se observó con el zika entre 2016 y 2018. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) recomienda seguir de cerca a todas las mujeres gestantes diagnosticadas con oropouche como medida de prevención.
“Las medidas para la prevención y el control de la infección causada por el virus de oropouche se mantienen activas y están vinculadas a la vigilancia y acciones de prevención que usamos actualmente para el control del dengue y otros arbovirus,” declaró Giovanny Rubiano García, director general del INS.
Rubiano García también destacó que el INS sigue de cerca los casos confirmados y hace un llamado a la comunidad para mantener limpios los depósitos de agua, reduciendo así el número de mosquitos vectores. “Colombia mantiene una vigilancia de los casos confirmados por laboratorio para oropouche, haciendo especial seguimiento para evitar que los casos leves evolucionen a graves. Cada caso es confirmado por laboratorio después de descartar otras infecciones causadas por mosquitos,” agregó.
El director de vigilancia en salud pública del INS, Franklyn Prieto, explicó que la vigilancia del dengue facilita la detección de oropouche, ya que ambos presentan síntomas similares. “Cuando se descarta dengue en las muestras recolectadas, el INS realiza pruebas para otros virus como zika, chicungunya, fiebre amarilla, oropouche y mayaro,” dijo Prieto.
A pesar de que aún no se ha comprobado la transmisión materno-fetal del virus de oropouche, el INS sigue las recomendaciones de la OPS y monitorea a las mujeres embarazadas para prevenir posibles efectos en los recién nacidos. “Si una mujer embarazada resulta infectada con el virus de oropouche, se deben evaluar las posibles consecuencias para el bebé, similar a las medidas adoptadas durante la epidemia de zika,” concluyó Prieto.