[EDITORIAL] Estrategias para mayor seguridad

Si se está observando que los índices criminales se siguen incrementando, entonces resulta más que necesario un replanteamiento de las políticas y estrategias de seguridad que se están implementando en muestra ciudad, para poner freno con mayor efectividad y contundencia a los promotores de las acciones violentas.

Lo cierto es que no se puede garantizar a la ciudadanía que habrá más seguridad, si no se aplican con rigurosidad algunas medidas; como ya lo habíamos comentado en este mismo espacio editorial, la proliferación de armas de fuego se constituye en una gran preocupación, porque no se ha logrado establecer de dónde procede su alto número y la forma en que estas llegan a manos de la delincuencia que actúa en las calles de la ciudad.

El solo hecho de haberse registrado en Barranquilla y los municipios que conforman el área metropolitana especialmente en Soledad y Malambo, tantas muertes violentas en los últimos días, nos indica que la acción delictiva sigue ganando terreno, con graves efectos para la tranquilidad y convivencia ciudadana.

Por otra parte, las autoridades no deben perder de vista que en varios municipios del Atlántico igualmente han comenzado a incrementarse los crímenes y ello también requiere ser objeto de un detenido análisis, así como de definiciones en el esquema de seguridad que deberá trazarse; antes que terminemos como una de las ciudades más violentas del Colombia, por lo que se debe actuar en concordancia con una estrategia que promueva un frente común contra la delincuencia en todo el departamento del Atlántico.

Nos parece conveniente que la comunidad siga siendo partícipe directa de todas las acciones que emprenda la Policía para que Barranquilla y el Atlántico vuelvan a ser el remanso de paz de hace mucho tiempo. Nos parece inaudito que todavía haya en el departamento comunidades desamparadas por la fuerza pública, ello explica la razón por la cual en varias poblaciones se ha disparado la inseguridad. Definitivamente nos encontramos ante un escalada de la violencia que debe ser cortada de raíz y es por eso que la presencia de la fuerza pública tiene que ser reforzada al máximo; la construcción de nuevas estaciones de policía donde no las hay y el mejoramiento de las ya existentes, debe ser prioritario en estos momentos.

No obstante, en el plano local es digno de destacar el trabajo que han venido desarrollando comerciantes, con el apoyo de la Policía Metropolitana, el cual ha permitido que gran parte de la zona del centro de Barranquilla, como lo es el Paseo Bolívar, la llamada zona cachacal, del Boliche y sus alrededores, cuenten hoy con varios Frentes de Seguridad y el compromiso de los que allí tienen sus negocios, de convertir ese lugar en una zona segura para todos los barranquilleros.

No de otra manera puede concebirse esta buena organización dispuesta en dicho sector, toda vez que allí se concentra un alto porcentaje del comercio de Barranquilla y reconocido ese aspecto, la fluidez de visitantes se acrecienta diariamente, motivo más que suficiente para que prevalezca una clara disposición de seguridad. La instalación de alarmas en ese denso sector, así como la donación de motocicletas por parte de la Alcaldía Distrital y la plena disposición de los agentes del orden en garantizar el cumplimiento de su deber a favor de la seguridad, constituyen puntos muy importantes que deberá tener en cuenta la ciudadanía.