En el municipio de El Copey, se llevó a cabo una caminata pacífica para rechazar el brutal asesinato de Miriam Mejía, una niña de 13 años, ocurrido el pasado miércoles en su hogar. El crimen, perpetrado por un sicario que le disparó tres veces, ha conmocionado a la comunidad.
La marcha comenzó en la plaza principal y recorrió varias calles hasta el barrio La Esperanza, reuniendo a residentes, el alcalde Assaid Raish Gámez, entidades locales, la iglesia católica, instituciones educativas y funcionarios públicos.
La comunidad se unió en una expresión de rechazo contra la creciente violencia, que en lo que va del año ha dejado 11 personas asesinadas y varios heridos de bala en la región.
Estudiantes y profesores de la Institución Educativa José Agustín Mackenzie, donde estudiaba Miriam, también se sumaron a la protesta.
En respuesta al crimen, se convocó un consejo de seguridad extraordinario. Como primera medida, se impuso una prohibición de circulación para parrilleros hombres de 6:00 p.m. a 5:00 a.m. Asimismo, se anunció una recompensa de $40 millones por información que conduzca al arresto del asesino, ya identificado por las autoridades.
La recompensa está financiada en partes iguales por la administración municipal y la Gobernación del Cesar.
