Un intento de vuelo hacia Venezuela, que incluía a varios expresidentes latinoamericanos y la exvicepresidenta colombiana Marta Lucía Ramírez, fue frustrado debido a lo que se alegó como un «bloqueo del espacio aéreo». La cancillería panameña ha convocado a la representante diplomática de Venezuela en Panamá para aclarar la situación.
El viernes, la Cancillería de Panamá emitió una convocatoria urgente a la representante de la Misión Diplomática de Venezuela en el país, luego de que un avión con varios expresidentes latinoamericanos y otros altos dignatarios no pudiera despegar desde el Aeropuerto Internacional de Ciudad de Panamá con destino a Venezuela.
La aeronave, que llevaba a los expresidentes Mireya Moscoso de Panamá, Evo Morales de Bolivia, Óscar Arias de Costa Rica y Felipe Calderón de México, así como a la exvicepresidenta colombiana Marta Lucía Ramírez, se quedó en tierra debido a lo que el presidente panameño, José Raúl Mulino, describió en Twitter como un «bloqueo del espacio aéreo venezolano».
La Cancillería panameña, a través de la misma plataforma, anunció que la representante diplomática de Venezuela había sido citada al Palacio Bolívar para discutir la situación. «Hemos citado a la representante de la Misión Diplomática de Venezuela para resolver esta situación,» indicó el Ministerio de Asuntos Exteriores en un tuit.
Por su parte, el vicepresidente de Comunicación de Venezuela, Alfred Nazareth, desmintió las acusaciones y calificó la declaración de Mulino como «falsa». En un mensaje en Twitter, Nazareth afirmó que «el espacio aéreo venezolano no está cerrado», y reafirmó la postura del gobierno venezolano sobre la preservación de su soberanía frente a lo que consideran injerencia extranjera.
El Ministro de Transporte venezolano, Ramón Velásquez, también intervino en la controversia, afirmando que «las operaciones aéreas se ejecutan con total normalidad». Velásquez señaló que, en el sistema Flight Radar, se podían observar tres vuelos de Copa Airlines operando en el espacio aéreo de Venezuela en ese momento.
La aerolínea Copa Airlines, que estaba operando el vuelo, aún no ha respondido a las solicitudes de comentarios realizadas por Reuters respecto al incidente.
Adicionalmente, la senadora colombiana Angélica Lozano, quien también estaba en el grupo afectado, denunció a través de sus redes sociales el «abuso» y la «falta de información» durante su detención. Lozano informó que, junto a dos mujeres ecuatorianas y dos jóvenes colombianos, fue deportada tras la confiscación de su pasaporte durante más de una hora.

La delegación del PP, conformada por 10 miembros, incluidos diputados, senadores y europarlamentarios, fue retenida en el aeropuerto de Caracas. Alberto Núñez Feijóo, líder de la formación, exigió la liberación inmediata de sus representantes y pidió al Gobierno de España que tome las medidas necesarias para asegurar su regreso. “Exijo su liberación inmediata y que el Gobierno de España ponga los medios necesarios a tal fin,” escribió Feijóo en X.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de España confirmó que los parlamentarios populares habían solicitado viajar a Venezuela como misión de observación electoral. Sin embargo, las autoridades venezolanas denegaron los permisos a pesar de los esfuerzos realizados por el Gobierno español. Otros grupos políticos decidieron cancelar su viaje ante la negativa venezolana, pero los miembros del PP insistieron en su misión. Según el informe de Miguel González, el cónsul general de España en Caracas estaba presente en el aeropuerto para asistir a los parlamentarios.
La delegación española, que incluye a figuras como Miguel Tellado, Esteban González Pons y Cayetana Álvarez de Toledo, ha expresado su descontento con la situación. Álvarez de Toledo condenó la acción del régimen venezolano, llamándolo «dictatorial e infame» y mostró su apoyo a los venezolanos que luchan por la libertad y la democracia. Feijóo destacó que la deportación de los parlamentarios refleja el «miedo» del gobierno de Maduro ante una posible derrota electoral.
En paralelo, la expresidenta panameña Mireya Moscoso y otros exmandatarios de México, Costa Rica, Bolivia y Colombia también enfrentaron problemas. Su vuelo desde el Aeropuerto Internacional de Tocumen en Panamá fue detenido y no pudo despegar debido a un supuesto bloqueo del espacio aéreo venezolano. Jorge Tuto Quiroga, expresidente de Bolivia, informó que el vuelo fue retenido hasta que los exmandatarios y la exvicepresidenta Marta Lucía Ramírez desembarcaran. Los pasajeros denunciaron que otros vuelos también estaban detenidos hasta que se resolviera la situación.
La senadora colombiana Angélica Lozano también se vio afectada, ya que se le negó la entrada a Venezuela junto a otros ciudadanos colombianos. Lozano relató que le fueron confiscados los pasaportes durante más de una hora y se le negó la comunicación con el embajador.
Estas acciones se producen en un clima de alta tensión política. Diosdado Cabello, uno de los máximos dirigentes del chavismo, había anticipado la situación en su programa de televisión, advirtiendo que los intentos de entrada al país por parte de los extranjeros serían bloqueados, describiéndolos como «showseros» y asegurando que serían expulsados.
Este incidente ocurre en un contexto de creciente tensión política, ya que a principios de esta semana, el expresidente argentino Alberto Fernández y el tribunal electoral de Brasil decidieron retirarse de una misión electoral para las próximas elecciones presidenciales en Venezuela, alimentando las dudas sobre la imparcialidad del proceso electoral.