En lo que va del 2024, la violencia homicida en el departamento del Atlántico ha alcanzado cifras preocupantes. Con un total de 436 homicidios reportados hasta la fecha, y 53 solo en lo que va de julio, la región enfrenta una situación crítica. Estos números contrastan con los 55 homicidios registrados en todo julio del año anterior.
El reciente fin de semana no fue la excepción, con once homicidios ocurridos entre sábado y domingo en Barranquilla y sus municipios circundantes. Esta escalada de violencia ha desafiado los esfuerzos de las autoridades por contenerla, dejando en evidencia la gravedad del problema.
Barranquilla lidera las estadísticas con 245 homicidios hasta la fecha, superando los 228 reportados para el mismo periodo en 2023. Según Arturo García, analista de seguridad, si esta tendencia continúa, podríamos igualar las 769 muertes violentas registradas en el departamento durante todo el año pasado.
El patrón observado en julio de 2024 sigue siendo alarmantemente similar al del año anterior, con 53 homicidios contabilizados y aún nueve días por transcurrir. La mayoría de estos incidentes se concentran en Barranquilla, Soledad y Malambo, reflejando un incremento considerable respecto a los 55 homicidios registrados en julio de 2023.
El último fin de semana, los barrios afectados en Barranquilla incluyeron El Bosque, Ciudadela 20 de Julio, Los Angeles 1, Las Malvinas, Pradera y La Luz, mientras que en los municipios, un trágico doble homicidio tuvo lugar en Ciudad Caribe II, Malambo.
La situación continúa evolucionando, con un impacto significativo en la comunidad y desafíos persistentes para las autoridades locales.