Por: Felipe Andrés Pérez Cabrera
Nada que reprocharle a los jugadores y al cuerpo técnico, los jugadores lucharon como verdaderos guerreros, el cuerpo técnico aplicó toda su sabiduría. Se puede decir que dieron lo mejor de si mismos.
Unidos como estábamos somos capaces de derrotar cualquier maña, trampa o dificultad, este pueblo tiene la capacidad para cumplir cualquier reto. Lo que si nos afecta es la traición desde adentro, la mala energía, la mala clase, que igual existe en cualquier sociedad, el problema es que acá la teníamos gobernando.
Perdimos por la mala clase depositada sobre el campo de fútbol, contrataron una avioneta, quien sabe pagada con recursos de que parte (tal vez públicos), con el letrero de fuera Petro. Además quienes intentaron destruir los festejos de los Colombianos, por desear ser campeones negando el día cívico, tomaron un avión y se fueron a Miami a ver el partido de la selección Colombia, con nuestra camisa oficial amarilla puesta, fueron a llevar su sal también al campo de juego.
El pueblo según ellos no tenía derecho a la felicidad, pero ellos si, con que dinero pagaron sus pasajes y entradas al estadio? Seguramente con sus sueldos o otros dineros públicos, que les pagamos o nos pertenecen. El Uribismo y la derecha están vivos, la mala noticia es que aún cuentan con buena salud.
Pd: en las fotos, alcalde de Cartagena en el Estadio de Miami. Pancarta contratada durante todo el partido para sobrevolar el estadio en Miami, con el lema «Fuera Petro».
Hay muchísimas fotos de altos funcionarios de la alcaldía de Medellín y Antioquía, que fueron al estadio después de asegurar que no decretaron el día cívico de festejos, porque ellos solo trabajan y el pueblo debe hacer lo mismo, escogió solo dos fotos para no saturar, una el presidente de la asamblea de Antioquía del partido Uribista de extrema derecha Creemos, la otra foto es del funcionario de la alcaldía de Medellín gerente de plaza mayor, uno de los cargos más importantes designados por el llamado «Fico».
Mientras no derroteros a esta escoria en la política, no seremos campeones del mundo, ni de América.