Trump y el misterio de su fórmula vicepresidencial

La Convención Nacional Republicana, que se celebrará este lunes para nominar oficialmente a Donald Trump como candidato a las elecciones presidenciales de noviembre, se ve envuelta en la incertidumbre por la elección de su fórmula vicepresidencial. La gran pregunta que ronda a los asistentes es quién acompañará a Trump en su posible regreso a la Casa Blanca.

El magnate neoyorquino ha ido filtrando durante semanas los nombres de sus posibles aliados para el puesto de vicepresidente, pero mantiene en secreto su elección final con el objetivo de generar máxima expectación. Lo único claro es que Trump busca a un candidato con lealtad absoluta, dado que considera que su exvicepresidente, Mike Pence, lo traicionó al negarse a bloquear la transición de poderes tras la victoria electoral de Joe Biden.

J.D. Vance, un favorito con una historia particular

Uno de los principales candidatos es J.D. Vance, senador por Ohio, de 39 años, quien consiguió su escaño en 2021 gracias al apoyo clave de Trump, a quien había criticado anteriormente. Con un doctorado en Derecho por la Universidad de Yale y una trayectoria como veterano de la Marina, Vance saltó a la fama con sus memorias «Hillbilly Elegy», que relatan su infancia en una familia de bajos recursos. Este joven se ha consolidado como un referente de la derecha estadounidense. Trump desmintió recientemente rumores sobre la descalificación de Vance por llevar barba, aclarando que «tiene buen aspecto».

Marco Rubio: una posibilidad a pesar de la enmienda constitucional

Otro nombre que suena con fuerza es el de Marco Rubio, senador de Florida. Su sueño de llegar a la Casa Blanca, tras su intento fallido en 2016, podría hacerse realidad si Trump lo elige como compañero de fórmula. Sin embargo, Rubio enfrenta un obstáculo legal: la Enmienda 12 de la Constitución prohíbe que los candidatos a la presidencia y vicepresidencia vivan en el mismo estado. Aunque Trump reside en Palm Beach y Rubio en Miami, resolver este conflicto de residencia podría convertir a Rubio, de 53 años, en el primer hispano en una fórmula presidencial estadounidense. A su favor, Rubio habla español con fluidez y es un referente para las comunidades cubana, venezolana y nicaragüense.

Doug Burgum: de desconocido a candidato potencial

Doug Burgum, gobernador de Dakota del Norte, de 67 años, era poco conocido a nivel nacional hasta que se postuló en las primarias republicanas. Tras retirarse para apoyar a Trump, ha ganado fuerza como posible vicepresidente. Burgum, multimillonario y ex empresario de software, ha sido crítico de las restricciones al aborto en Dakota del Norte, lo que genera dudas en Trump. A pesar de ello, su experiencia empresarial y apoyo a Trump podrían jugar a su favor.

Tim Scott: un aliado para acercar a la comunidad afroamericana

Tim Scott, el único senador negro del Partido Republicano, es un destacado representante de Carolina del Sur. Nieto de un trabajador del algodón, Scott es un ejemplo del sueño americano. Aunque nunca superó el 4 % de las intenciones de voto en las primarias, ha sido un firme aliado de Trump. En enero, interrumpió un discurso de Trump para expresarle su apoyo. Si fuera elegido, Scott podría ayudar a Trump a conectar con la comunidad afroamericana, fortaleciendo su base electoral.

La incertidumbre sobre quién será finalmente el compañero de fórmula de Trump continúa, manteniendo en vilo a los seguidores y detractores del exmandatario.