Desde las alturas del Nevado del Ruíz hasta el próximo desafío en el Aconcagua, un viaje en busca de nuevos récords personales y familiares.
Eduardo Enrique Mongua Villafañe, un apasionado cartagenero de 33 años, ha encontrado en el alpinismo su mayor desafío. Desde hace cuatro años, se ha dedicado a practicar este deporte extremo que implica escalar cumbres rocosas o heladas de alta montaña, desafiando tanto su resistencia física como mental.
El camino de Mongua en el alpinismo comenzó como un deseo personal de superación. Ha conquistado el Nevado del Ruíz, una de las montañas más altas de Colombia, situada a 5.300 metros sobre el nivel del mar. Sin embargo, ahora tiene la mirada puesta en un objetivo aún más ambicioso: el Monte Everest, la cima más alta del mundo.
“Esta expedición a Bolivia es mi próximo reto para poder llegar al cerro de Aconcagua, que es la montaña más alta de América, ubicada en Argentina, a finales del mes de noviembre”, compartió Mongua, quien ya ha alcanzado los 5.800 metros en sus experiencias previas.
Para Eduardo, convertirse en alpinista fue un impulso que surgió a partir de su hijo. Después de ver una película juntos, su hijo expresó el deseo de que su padre escalara el Everest algún día. Esta petición se convirtió en un compromiso personal y familiar que ahora lo motiva en cada paso hacia su meta más alta.
El alpinismo en Cartagena ha encontrado en Mongua un pionero decidido a romper límites, inspirando a otros con su determinación y dedicación a alcanzar lo aparentemente inalcanzable.