Alcalde Krasnov enfrenta críticas por presunto favoritismo hacia familiares de concejales en reparto de contratos.
Mikahil Krasnov, alcalde de Tunja, ha generado controversia al ser acusado de distribuir contratos públicos a familiares de concejales, desencadenando un escándalo que pone en entredicho su gestión durante el primer semestre de mandato. Las acusaciones, que incluyen presuntos maltratos contra funcionarios y prácticas de corrupción en la contratación pública, han provocado un ambiente tenso en la capital boyacense.
El exsecretario de infraestructura del municipio denunció públicamente al alcalde, acusándolo de maltrato y de intentar beneficiar a terceros a través de contratos irregulares. Estas acusaciones se suman a las demandas que enfrenta Krasnov por supuesta inhabilidad y por firmar contratos con entidades públicas antes de su elección como alcalde.
Recientemente, la gestora social Sara Catalina Pedraza, pareja del alcalde, fue señalada por supuestamente facilitar contratos a familiares de concejales, según audios y chats filtrados. Krasnov, en respuesta, atribuyó las acusaciones a una estrategia de desinformación y defendió que es común que funcionarios públicos en una ciudad pequeña como Tunja tengan vínculos familiares.
«Desde el primer día que yo gané llegaron todos los políticos regionales y locales a pedir tajadas y yo a nadie di. Yo creo que de fondo está pataleteando la gente que estaba acostumbrada de recibir algo», comentó el alcalde, refiriéndose a las presiones recibidas para repartir beneficios entre grupos políticos tradicionales.
Las denuncias han sido elevadas a la Fiscalía por tráfico de influencias y contratación con personas interpuestas, mientras que Krasnov insiste en que las acciones legales en su contra son parte de una estrategia para desestabilizar su administración.
«Respecto a los señalamientos de supuestos maltratos, expresó que obedecen a que el querer hacer un gobierno eficiente es considerado como acoso laboral», indicando que está dispuesto a defenderse legalmente de las acusaciones.
El futuro político de Krasnov ahora queda en manos de las investigaciones en curso, que se espera arrojen luz sobre las acusaciones y determinen las responsabilidades pertinentes dentro de su gestión municipal.