El alcalde de Santa Marta, Carlos Pinedo Cuello, parece tener claras sus prioridades.
Con una cómoda mayoría de 15 de 19 concejales a su favor, solo cuatro quedan fuera de su gobierno. Esto ha allanado el camino para decisiones estratégicas, como destinar $1.310 millones para la recuperación del centro histórico.
Sin embargo, lo que realmente ha captado la atención es la asignación de $7.200 millones para las próximas fiestas del mar. En lugar de centrarse en problemas urgentes como la infraestructura de la ciudad, Pinedo Cuello parece apostar a animar las festividades.
«¿Arreglar la casa? ¡Qué aburrido! Preferimos que Silvestre ponga a bailar a todos», comentó sarcásticamente un ciudadano samario. Mientras tanto, los críticos señalan que la ciudad necesita más que entretenimiento para enfrentar sus desafíos urbanos y sociales.
Con la mayoría en el concejo, el alcalde tiene la oportunidad de marcar la diferencia, aunque muchos se preguntan si estas prioridades reflejan realmente las necesidades de Santa Marta o solo los intereses políticos de la administración actual.
