“Otra muestra de persecución política contra mi persona»: Álvaro Uribe tras negarle la recusación contra el fiscal Villareal

El expresidente Álvaro Uribe denuncia persecución política en medio de proceso judicial

El expresidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, ha alzado su voz en redes sociales para denunciar lo que califica como una persecución política en su contra, en el marco de un proceso judicial donde enfrenta acusaciones por presuntos vínculos con paramilitares y múltiples delitos.

Uribe Vélez, quien lideró el país entre 2002 y 2010, se refirió enérgicamente a recientes decisiones tomadas por la Fiscalía General de la Nación, particularmente el cambio de fiscal a cargo del caso. Alega que este cambio no ha sido suficiente para garantizar la imparcialidad, mencionando que la recusación previamente solicitada fue rechazada bajo argumentos que considera cuestionables.

El exmandatario acusa al fiscal saliente, Gilberto Iván Villarreal, de haber actuado con parcialidad y favorecimiento hacia exaltos funcionarios del gobierno anterior, lo cual, según él, invalida el debido proceso que debería ampararlo. Además, Uribe señala que, a pesar de las irregularidades que denuncia, el proceso en su contra continúa avanzando.

En un video publicado posteriormente, Uribe expuso más detalles de su posición, reiterando sus argumentos sobre la falta de imparcialidad del fiscal Villarreal y su sorpresa ante la imputación de nuevos delitos en su contra, como el soborno. Además, anunció la presentación de una tutela para revisar las decisiones judiciales tomadas hasta el momento.

Este episodio se enmarca en un contexto judicial complejo, donde también se han aceptado impedimentos por parte de magistrados del Tribunal Superior de Bogotá que estaban a cargo del juicio. Esto, según Uribe, refleja un intento por mantener la transparencia y la equidad en el proceso legal en su contra.

La situación continúa siendo un tema de alto interés en Colombia, donde la figura de Álvaro Uribe Vélez sigue siendo central tanto en el ámbito político como en el judicial, generando opiniones encontradas sobre la naturaleza y el curso del proceso que enfrenta.