En los últimos días, se conoció la intención de la administración del alcalde Dumek Turbay para expedir un decreto que busca regular la actividad de las chivas rumberas en Cartagena.
Las quejas de la comunidad han crecido, por cuenta de los altos decibeles de ruido con el que circulan, además de parquear en zonas prohibidas, lo que ha generado congestión vehicular los fines de semana.
Pues bien, el pronunciamiento de Turbay fue bien acogido por un sector del gremio, que coincide con el alcalde en que falta más control a una actividad donde actualmente, según ellos, participan muchos foráneos.
Así lo indicó Lesvy Silva, propietaria de un vehículo turístico, quien señaló que hoy la rentabilidad del negocio se ha venido a menos, porque hay otros buses convertidos en discotecas que no guardan la tradición ni los diseños, y que ofrecen recorridos a precios muy bajos.
“El problema no es el distrito ni el tránsito, ellos quieren trabajar con nosotros, pero muchos propietarios de las nuevas chivas hacen caso omiso porque desconocen cuáles son los reglamentos; cuáles son las reuniones que hemos venido haciendo con DATT, Corpoturismo y EPA», dijo Silva.
Dijo, además, que si el alcalde quiere que las chivas paguen el impuesto, deben permitir matricular los vehículos.
Por su parte, desde la administración distrital preparan un decreto con todos los parámetros en que podrá ofrecerse el servicio.
