Hace poco se dio a conocer la confesión que arrojaría una luz en el caso del asesinato del profesor de la Universidad del Atlántico, Jorge Freytter Romero, ultimado en el año 2001 en Barranquilla, cuyo cuerpo fue hallado en vía a Ciénaga con un disparo en la cabeza. El homicidio se perpetró en la época donde los sindicatos y profesores fueron perseguidos por el Bloque Norte de las AUC.
Sería esta la primera vez que un agente del Estado acepta responsabilidad en el asesinato y desaparición de Freytter, reconocido docente de la UniAtlántico. El confesor es el teniente (r) Flover Argeny Torres, antiguo subcomandante del Gaula de la Policía en Barranquilla en 2001, el cual estuvo prófugo de la justicia por varios años y quien, por primera vez, admitió y detalló ante la Jurisdicción Especial para la Paz, su participación en este crimen en la noche del 28 de agosto de ese año.
Flover inició su relato indicando que el secuestro del profesor Freytter fue realizado el mismo día de su muerte por paramilitares al mando de Carlos Arturo Romero, alias ‘Montería’. Todo esto en alianza con integrantes del Gaula Militar del Atlántico como un sargento de apellido Olmos y otros soldados.
Los detalles del fatídico secuestro
El profesor Freytter fue subido a una camioneta y trasladado a una bodega que era propiedad de Enilce López ‘La Gata’, ubicada en la Vía 40 de Barranquilla, donde fue víctima de tortura, le sacaron un ojo y se cometieron todo tipo de aberraciones en su contra porque creían que era guerrillero.
Flover afirmó que tras el llamado del sargento Laborde, su enlace con las AUC, se le indicó del secuestro de Freytter y le ordenó trasladarse hasta la bodega del horror para que averiguara más sobre el caso.
“(Laborde) ya había hablado con alias ‘MONCHO’, quien era el jefe militar de las AUC en Barranquilla y le había confirmado que tenían en su poder a alias ‘PETER’, miembro del frente 19 de las Farc y que este poseía valiosa información acerca de las actividades que iban a desarrollar en la ciudad en temas de secuestros y atentados, a lo que le dije que fuera a averiguar o enviara a alguien de confianza para saber de qué se trataba”, dijo Torres a la JEP.

Según lo relatado por el retirado teniente, los paramilitares y los militares del Gaula del Atlántico terminaron cometiendo una confusión porque el profesor Freytter no era ningún alias ‘Peter’, por ende, no tenía información sobre la guerrilla. De igual forma, lo siguieron torturando para sacarle supuesta información de nexos de las Farc con personal de la Universidad del Atlántico, pero terminaron acabando con su vida por asfixia con una bolsa que le colocaron en la cabeza.
“Le habían puesto la bolsa plástica y no había aguantado y había fallecido por ahogamiento”, dijo el teniente Flover Argeny Torres textualmente frente al homicidio del profesor Freytter.
El teniente condenado por este crimen en su confesión ante la JEP, aseguró que había obtenido más datos del homicidio de Freytter al preguntar a los agentes Julio César Pacheco Bolívar y Germán Sáez Cuesta (aún impunes), quienes se encontraban en el lugar acompañando el acto criminal adelantado por los paramilitares. Torres estaba en Sucre y llegó a la madrugada.
“Me respondieron que la verdad al parecer se había tratado de una equivocación, pero tratando de justificar también que la persona secuestrada o algún familiar además pudo haber tenido relación con algún hecho de la muerte de un suboficial del Ejército y sumado a su posible pertenencia a la guerrillase había tomado la decisión de interrogarlo. Pregunté si la persona había dicho algo de la guerrilla en la universidad y me dijeron que no”, dijo a la JEP.
Una vez fallecido, sacaron el cuerpo…
El acto criminal ya estaba consumado y ahora el paso a seguir era ver cómo se iban a deshacer del cuerpo del profesor Freytter para no dejar rastro del homicidio. Ante esto, Flover Argeny confesó su participación directa en el delito junto con sus compañeros Pacheco Bolívar, Sáez Cuesta y su conductor Rafael Mariano Silvera, así como los paramilitares a cargo en cabeza de alias ‘Montería’.

Según lo confesado por Flover Argeny Torres, subieron el cuerpo del profesor Freytter al vehículo en el que iban sus subalternos, los agentes Julio César Pacheco y Germán Sáez en compañía de alias ‘Montería’ y se dirigieron fuera de Barranquilla, llegando a la zona conocida como Palermo.
Flover aclaró a la JEP que una vez en el lugar, bajaron el cadáver del profesor Jorge Freytter y el agente Pacheco le pegó un tiro en la cabeza al docente para rematarlo y ahí lo dejaron. Acto seguido, se devolvieron para Barranquilla.
“Se decidió que lo mejor era abandonarlo a las afueras de la ciudad y lo llevaron en el carro hasta la vía que conduce al municipio de Ciénaga (Magdalena) estando allí en un paraje, se bajó Pacheco, junto con alias “Montería” y Sáez, trasladaron el cuerpo a la zona verde y en ese momento PACHECO sacó una pistola y le propinó un disparo para asegurarlo porque a él ya lo había visto”, narró el teniente Flover que iba en otro vehículo.
De hecho, según otro testimonio revelado por el informativo fuente de este escrito, realizado ante la JEP, el teniente Rafael Mariano Silvera condenado también por este crimen y quien manejaba la camioneta del teniente Flover Argeny Torres, aseguró que este le informó que debían acompañar a ‘Montería’ y los policías porque “iban a deshacer de un encarte (el cuerpo) que tienen con un guerrillo”.
El relato del policía Mariano Silvera continúa: “se escuchó un disparo y regresa el automóvil con las mismas tres personas (serían “Montería”, Pacheco y Sáez)”.
Volviendo a lo contado por Flover Argeny, el segundo al mando del Gaula de Barranquilla, aún no se ha esclarecido la eventual responsabilidad de informantes de las AUC infiltrados dentro de la Universidad del Atlántico como Carlos Alfonso Palma en la información que permitió el secuestro del profesor Freytter, crimen que enlutó al caribe en medio de esta alianza de los paramilitares con miembros de la Fuerza Pública.
Terminado el crimen y la desaparición del cuerpo del profesor de la escena de los hechos, todos se fueron para sus casas a “descansar” como retrató el agente Mariano Silvera.
Ante esta y otras revelaciones, que se dieron a conocer a escasos tres meses de que se conmemoren 23 años del crimen y desaparición del profesor Jorge Freytter, mientras varios de los implicados desde el ala del Estado permanecen impunes y se desconoce su paradero como se ha explicado, el teniente Flover Argeny hizo una especial solicitud.
Flover Argeny pide urgente protección ante el gran riesgo que corre tras haber confesado estos hechos que siempre habían estado en bocas de paramilitares y que develan el contubernio entre la Fuerza Pública y el paramilitarismo en Barranquilla en los años más crueles del conflicto.
Fuente: Sistema Integrado de Información.