Comunidad: desgobierno grosero y ofensivo de Carlos Pinedo sume a Santa Marta en una crisis de seguridad sin precedentes

Intervención del gobierno Nacional pide la exalcaldesa Virna Johnson ante incompetencia e inoperancia del actual mandatario.

Por Juana de Arco
La alarmante situación de inseguridad que atraviesa Santa Marta ha encendido las alarmas entre sus habitantes y figuras públicas, quienes denuncian la falta de liderazgo del actual alcalde, Carlos Pinedo Cuello. La ciudad, que en las últimas décadas se había distinguido y reconocida por su tranquilidad y belleza natural, ahora se encuentra sumida en una ola de violencia y criminalidad que parece no tener fin.

El alcalde viajero, como se le reconoce a Carlos Pinedo, parece haberle quedado grande la alcaldía para la cual se postuló y fue «electo», pues aparte de dedicarse a viajar los primeros 100 días de «mandato», nada ha hecho por la ciudad y la indiferencia con los samarios y la capital es evidente, donde la criminalidad aumenta y se desborda en los barrios, quedando a la deriva la ciudad y a merced del crimen.

Pinedo, quien no ha dejado de hacer uso de un léxico extremadamente vulgar y ofensivo contra sus opositores, da muestra de su incapacidad para afrontar las problemáticas que tienen sumida en una gran crisis sin precedentes que haya presentado Santa Marta, algo nunca antes visto que echa al suelo todos los avances logrado con mucho sacrificio en los últimos años.

Así como de manera sorprendente ha llevado a Santa Marta en un letargo en tan solo cinco meses de desgobierno, se espera que el burgomaestre con su gabinete (que parece estar engavetado), actúen y por fin comiencen a gobernar y saque de ese abismo al que han llevado a la ciudad.

Preocupada por la ciudad por la cual ha luchado, a exalcaldesa Virna Johnson sigue siendo una de las voces más críticas, señalando que la ciudad se ha convertido en un escenario de asesinatos, extorsiones, robos a bancos, atracos callejeros y tiroteos a plena luz del día. Johnson atribuye este deterioro a la falta de acción y permisividad de la administración de Pinedo frente a la delincuencia.

image 7 1
El alcalde es el único responsable por la inseguridad que golpea a los samarios.
«Ahora es que va a salir corriendo»: Dormido está el alcalde Pinedo Cuello, quedado en sus recuerdos viajeros que por naturaleza de su ineptitud, tiene en crisis a Santa Marta.

«Santa Marta está en crisis, no importa cuánto quieran engañar o comparar«, escribió Johnson en sus redes sociales, destacando además el deterioro de las obras públicas y la invasión del espacio público.

En respuesta, Carlos Pinedo ha intentado desviar la responsabilidad como des contumbre, culpando a las administraciones anteriores por la situación actual, sin embargo, es la misma comnidad que reclama seguridad ante un alcalde viajero que nada hace por la ciudad. La absurda e inexcusable razón que trata de argumental Pinedo, los narco clanes se afianzaron en Santa Marta durante los doce años previos a su mandato, llevando a la ciudad a ocupar el puesto 38 entre las más violentas del mundo. No obstante, estas declaraciones han sido vistas por muchos como una excusa para justificar la ineficacia y falta de resultados tangibles de su administración.

«Ya basta de estar tratando de rebuscarse excusas en donde no las hay, empiece a trabajar de verdad, si no puede, bájese del barco y deje a personas verdaderamente capaces de llevar a nuestra ciudad a buen rumbo», manifestó un samario indignado ante el crecimiento delictivo y crímenes que ahogan a Santa Marta.

Los ciudadanos, atrapados en medio de esta disputa política, se enfrentan diariamente a la creciente inseguridad. La falta de inversión en seguridad, la desarticulación con la Policía Nacional y la inoperancia de los sistemas de vigilancia como la sala SIES y las cámaras de seguridad, son apenas algunos de los problemas que evidencian el desgobierno de Pinedo.

La situación es tan grave que se ha hecho un llamado urgente al Gobierno Nacional para que intervenga y tome medidas contundentes para garantizar la seguridad y el bienestar de los habitantes de Santa Marta. La desesperación y el temor se han apoderado de la ciudad, que clama por un liderazgo efectivo y acciones concretas.

Mientras tanto, la administración de Pinedo parece estar más enfocada en justificar sus fallos que en ofrecer soluciones reales. La falta de liderazgo y la incapacidad para enfrentar la crisis de seguridad dejan a Santa Marta vulnerable y en peligro, esperando una intervención que parece no llegar.