El empresario barranquillero enfrentará cargos por su presunta implicación en un caso de soborno a un servidor público, vinculado al controvertido pleito por el dominio de la Universidad Metropolitana y el Hospital Metropolitano.
Mañana jueves, a las 8:00 de la mañana, se llevará a cabo la esperada audiencia de imputación contra Luis Fernando Acosta Osio, figura central en el conflicto por el control de importantes instituciones de la ciudad. Acosta Osio enfrentará el cargo de cohecho por dar u ofrecer, relacionado con un supuesto intento de soborno a un funcionario público.
El caso recuerda al escándalo que condujo a la cárcel al senador Eduardo Pulgar, quien admitió su culpabilidad después de que se hiciera pública una grabación comprometedora. En ella, Pulgar ofrece un soborno al juez de Usiacurí para favorecer a unos allegados, incluyendo a la familia Acosta.
En la grabación, Pulgar menciona que la Universidad le proporciona «becas», «puestecitos» y «le tiran un billetico». Luego, ofrece al juez una suma considerable para decidir a favor de sus amigos. El juez rechaza la oferta, pero Pulgar se declara culpable y es condenado por la Corte Suprema.
La sentencia señala que Luis Acosta, es decir, Luis Fernando Acosta Osio, también solicitó la ayuda de Pulgar, según otra grabación. A pesar de estas evidencias, Acosta Osio negó cualquier relación con Pulgar y culpó al juez y a los periodistas de corrupción.
Después de catorce meses, Acosta Osio finalmente será imputado por el mismo delito que llevó a Pulgar a prisión. Mientras tanto, Juan José Acosta Osio, su hermano y rector de la Universidad Metropolitana, permanece prófugo con una orden de captura pendiente.
La Fiscalía también investiga a dos exministras de educación, María Victoria Angulo y Janeth Giha, por posibles conductas ilícitas en este caso. La audiencia de imputación de Luis Fernando Acosta Osio marca un paso crucial en la búsqueda de justicia y transparencia en este controvertido asunto.
