Amcham Colombia expresa inquietudes sobre las implicaciones del Decreto 659 en la eficiencia y competitividad del comercio internacional.
La reciente implementación del Decreto 659, que introduce modificaciones al Estatuto Aduanero de Colombia, ha generado preocupación en la comunidad empresarial del país, en particular en la Cámara Colombo Americana (Amcham Colombia). Esta entidad ha manifestado su preocupación por las potenciales repercusiones que esta normativa podría tener en el comercio exterior colombiano.
El decreto, promulgado el 22 de mayo de 2024, ha sido objeto de cuestionamientos debido a la falta de claridad en sus disposiciones. Una de las principales modificaciones destacadas por la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) es la obligación de los importadores de realizar una declaración anticipada, con 48 horas de antelación, sobre los productos que ingresarán al país.
En este sentido, Amcham Colombia ha señalado que la nueva normativa impone una carga adicional de información tanto para los importadores como para las entidades encargadas del control aduanero, como el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) y el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima). Sin embargo, preocupa a la Cámara si estas entidades cuentan con los recursos humanos, financieros y tecnológicos necesarios para procesar eficientemente esta cantidad de información.
Otra preocupación expresada por Amcham Colombia es la ausencia de un plan de implementación detallado y divulgado con anterioridad. Esta falta de claridad dificulta la adaptación de los actores del comercio exterior a las nuevas disposiciones gubernamentales, lo que podría ocasionar congestionamientos en los puertos y aeropuertos del país, afectando la operatividad de las empresas.
La modificación también impacta negativamente en los Operadores Económicos Autorizados (OEA), quienes tras haber cumplido con rigurosos estándares de seguridad aduanera, ahora se ven obligados a sumarse a la lista de declaraciones anticipadas, lo que podría aumentar la congestión y la complejidad de las operaciones.
Ante este panorama, AmCham Colombia ha instado al Gobierno Nacional a una revisión detallada del decreto y a la clarificación de sus aspectos más relevantes. El objetivo es garantizar que las nuevas regulaciones no comprometan la eficiencia ni la competitividad del comercio exterior colombiano.
Finalmente, la Cámara advierte que en un contexto de desaceleración económica, el aumento en trámites y tiempos de operación generará sobrecostos para las empresas y, en última instancia, para los consumidores finales, afectando la lucha contra la inflación y el proceso de reactivación económica del país.