Las lluvias torrenciales y las inundaciones que han afectado al sur de Brasil desde finales de abril han provocado la muerte de al menos 155 personas, según el informe oficial divulgado este viernes por las autoridades.
El sur de Brasil enfrenta una catástrofe debido a las lluvias torrenciales e inundaciones que comenzaron a finales de abril, dejando un saldo de al menos 155 fallecidos, según el último balance oficial. El estado más afectado es Río Grande do Sul, que limita con Uruguay y Argentina, con 154 víctimas mortales y 98 personas desaparecidas. El estado vecino de Santa Catarina también ha registrado una muerte.
El informe más reciente, publicado este viernes, reporta tres nuevos fallecimientos en comparación con el día anterior y una reducción de seis personas en la lista de desaparecidos. La región metropolitana de Porto Alegre es la zona más golpeada, manteniéndose inundada desde hace dos semanas debido a la crecida sin precedentes del río Guaíba.
El agua ha invadido hogares, edificios públicos, hospitales y comercios, inundando por completo el aeropuerto internacional de Porto Alegre, que permanece cerrado desde el 3 de mayo. Las intensas lluvias, las inundaciones y los deslizamientos de tierra han causado graves daños en el 90 % de los municipios de Río Grande do Sul, una región clave para la agricultura y la industria, con una población de 11 millones de habitantes.
En total, 2,2 millones de personas han sido afectadas directamente por esta tragedia. De estas, 618.317 han tenido que abandonar sus hogares, y 78.165 se encuentran en refugios temporales. Las autoridades han desplegado 27.688 personas para las labores de rescate y asistencia a los damnificados, logrando rescatar hasta ahora a 82.666 personas.