Un artefacto explosivo abandonado en la vía que conecta Miranda con Corinto causó la muerte de un menor y dejó gravemente heridos a dos adultos.
En la tarde del viernes 17 de mayo, un atentado con un artefacto explosivo en la vía entre Miranda y Corinto, en el norte del Cauca, resultó en la trágica muerte de un niño de 12 años y dejó gravemente heridas a dos personas adultas. El incidente ocurrió alrededor de las 2:00 p. m., cuando las víctimas viajaban en motocicleta cerca del sector de Guatemala, antes del puente Güengüe.
Las autoridades locales informaron que los grupos armados responsables del ataque habrían dejado el explosivo en la vía con la intención de atacar a la fuerza pública. Según los informes, «el menor falleció en el lugar debido a la gravedad de sus heridas».

Las imágenes del lugar del incidente muestran a las tres personas tendidas en el suelo, incluyendo al niño. Los dos adultos heridos fueron trasladados de inmediato al hospital municipal y luego a una clínica de mayor complejidad en Cali. Las primeras versiones indican que el mototaxista, una mujer y su hijo se desplazaban en la motocicleta cuando fueron sorprendidos por la explosión.
Las heridas sufridas por los adultos son críticas, lo que ha generado gran preocupación entre los habitantes de la zona. El ataque parecía estar dirigido al Ejército Nacional, que había pasado por la vía minutos antes. Las autoridades están investigando a los responsables, quienes probablemente pertenecen a la estructura Dagoberto Ramos, del Estado Mayor Central de las disidencias de las Farc, liderada por alias Iván Mordisco.

El general Federico Mejía, comandante del Comando Específico del Cauca, confirmó que «por fuente humana se informa de la activación de un artefacto explosivo de gran poder, en área de injerencia de las GaOr Dagoberto Ramos, quienes al parecer pretendían atentar contra la fuerza pública, pero en su intento fallido ejecutan el acto terrorista asesinando tres personas, al parecer uno de ellos menor de edad». El alcalde de Miranda, Walter Zúñiga, también se pronunció, lamentando que «nuestra población civil vuelve a ser víctima de un artefacto explosivo; esto ya es una situación demencial».
Este no es el primer ataque en Miranda este mes. El 10 de mayo, un vehículo cargado con explosivos detonó en el barrio Porvenir, matando a un perro callejero y causando daños materiales. En abril, otro atentado con carro bomba cerca de una estación de Policía dejó dos personas heridas.
La estrategia conocida como “bomba loca”, utilizada por insurgentes para desestabilizar utilizando proyectiles improvisados, ha sido atribuida a la estructura criminal Dagoberto Ramos en la región. Estos incidentes continúan afectando gravemente a la población civil, que se encuentra atrapada en medio de los ataques dirigidos contra la fuerza pública.