Mientras los debates apasionados en los foros son tan productivos como la lluvia en el desierto, la violencia sigue campante tras el cese del acuerdo con las Organizaciones Criminales, en Santa Marta se vive un cuento de hadas.
Desde el martes pasado, la Secretaría de Gobierno decidió tomarse unas vacaciones imprevistas. ¿La razón? La casa donde funcionaba fue alquilada, y el mobiliario, en una jugada maestra de logística, ahora descansa en lo que fue la sede de campaña de Pinedo Cuello. Como quien dice, la Secretaria de Gobiernod e Santa Marta, ahora goza de una «casa en el aire»
Recientemente el secretario de gobierno, Camilo George, participó en el conversatorio sobre la gestión publica territorial de la convivencia y seguridad organizado por la Policíe Metropolitana de Santa Marta, donde intervino sobre el enfoque de derechos humanos, transparencia, prevención y corresponsabilidad, sin embargo, del dicho al hecho, la realidad que afrontan los samarios, dista mucho de los discursos que brinda George en cada conferencia o reunión.
Los casos violentos registrados en las últimas 24 horas (por tomar un margen de tiempo), muestran casos sangrientos como en el barrio Timayuí’ en donde asesinaron a un hombre, al igual que la balacera del barrio ‘Los Fundadores’ que dejó un saldo de 2 muertos y 2 heridos. En cuanto a robos está el ‘taquillazo’ en una sucursal del Banco de Occidente, ubicada en la carrera 15 con Avenida del Libertador, son muestra de una ciudad con alto grade de inseguridad en deterioro.
La inseguridad en las calles de la ciudad, reflejan el grado de indiferencia de la secretaría de Gobierno que bien luce solo en sus selfie.
¡Qué curioso es el destino! Mientras la inseguridad se dispara, la administración local parece tener prioridades más importantes que la seguridad de sus ciudadanos. Tal vez deberían considerar trasladar también a los ciudadanos a la bodega, para que al menos estén seguros junto a los muebles. Eso sí, con las luces apagadas, no sea que alguien note la ironía.
