En un suceso que ha dejado perpleja a la comunidad de El Banco, Magdalena, una maquinaria perteneciente al municipio ha desaparecido en circunstancias que parecen sacadas de un espectáculo de ilusionismo. El protagonista de esta insólita historia es un bulldozer que, según información de la alcaldía municipal, habría sido objeto de robo en la madrugada del pasado 9 de mayo.
El arte del hurto, digno de los más hábiles magos, dejó desconcertados a propios y extraños. El vehículo, que se encontraba averiado en La Sabana de Molina, en el corregimiento de Hatillo de la Sabana, se esfumó sin dejar rastro, desafiando toda lógica y seguridad.
El caso ha sido comparado con las hazañas del famoso ilusionista David Copperfield, quien en sus espectáculos ha hecho desaparecer desde elefantes hasta la Estatua de la Libertad. «Los rateros honrados, como dice la custodia de Badillo, al parecer poseen los mismos poderes que el mago norteamericano», comentó un residente local sorprendido por el suceso.
La administración municipal ha tomado cartas en el asunto, ofreciendo una recompensa de 5 millones de pesos a quien pueda brindar información que conduzca al paradero de la maquinaria y los responsables de su desaparición. Sin embargo, hasta el momento, los detalles del robo permanecen envueltos en un velo de misterio.
El bulldozer en cuestión fue donado por Cormagdalena al municipio durante el gobierno de William Lara Mizar y ha sido utilizado para diversos fines, desde trabajos en el botadero a cielo abierto hasta reparaciones en la vía que comunica con el corregimiento de Hatillo de la Sabana. Su desaparición ha generado preocupación en la comunidad, especialmente en vista de la temporada invernal que se avecina, donde su uso resultaría crucial.
Las autoridades han iniciado las investigaciones pertinentes, pero hasta el momento no se han encontrado pistas sólidas sobre el paradero del vehículo. Se espera que la luz pública arroje claridad sobre este enigma que ha dejado a todos boquiabiertos, y que el culpable de este acto de magia forzada sea llevado ante la justicia para responder por sus acciones.
Mientras tanto, en El Banco, la incertidumbre y el desconcierto reinan, y la esperanza de recuperar el bulldozer perdido se mantiene viva entre los habitantes, quienes aguardan ansiosos el desenlace de esta extraña historia.
