En una jornada rebosante de color, música y tradición, Valledupar se convirtió en el epicentro de la celebración cultural al conmemorar tres décadas del emblemático desfile de piloneras. Este evento, que marca el preludio del Festival de la Leyenda Vallenata, no solo exalta la riqueza folclórica de la región, sino que también fortalece el arraigo y la difusión de sus raíces culturales únicas en el mundo.

Desde la emblemática institución educativa Alfonso López hasta la majestuosa glorieta de la Pilonera Mayor, las calles vibraron con la emoción de miles de vallenatos y visitantes que se congregaron para entonar los versos que dan vida a esta gesta nacida en la tierra del vallenato.
Familias completas, de todas las edades, se unieron para ser testigos y participantes de esta tradición que une corazones y enaltece el folclor. El desfile, adornado con una paleta de colores y el sonido inconfundible de la música tradicional, fue un espectáculo para todos los sentidos.
La presencia de destacadas figuras como Iván Villazón, ícono de la música vallenata, en una carroza entonando sus más grandes éxitos, así como la participación de numerosos artistas, reinas de belleza y personalidades del entretenimiento, agregó un brillo especial a la celebración.
«Ver a nuestra gente emocionada y comprometida con nuestra cultura es inspirador. Este desfile es prueba de que nuestras tradiciones perduran con fuerza y prometen perdurar en el tiempo», expresó emocionado Rodolfo Molina Araújo, presidente de la Fundación Festival de la Leyenda Vallenata, mientras se unía al recorrido.
Esta magnífica celebración, que ahora forma parte esencial del Festival de la Leyenda Vallenata, rinde homenaje a las raíces ancestrales que han forjado la identidad de Valledupar a lo largo de los años. Es el canto que fusiona la vida con la música, donde cada tambora lleva impreso el alma de todo un pueblo.
El desfile de piloneras se erige como un tributo a la pasión, la historia y la autenticidad de una tierra que ama y vive su folclore.