Mientras la alcaldía destina recursos a colegios con buena infraestructura los más necesitados permanecen en el olvido.
En medio de la comunidad educativa de Santa Marta, surge una preocupación creciente debido a una serie de irregularidades detectadas en la Institución Educativa Quinto Centenario. Padres de familia y estudiantes han alzado su voz para denunciar una serie de deficiencias que afectan la calidad y seguridad del servicio educativo en el plantel.
Uno de los problemas más alarmantes es la falta de personal docente. Según las denuncias, actualmente faltan al menos diez docentes en la institución, lo que ha generado un desequilibrio en la impartición de clases y ha llevado a la deserción de estudiantes. Además, se reporta que algunos docentes están experimentando retrasos en el pago de sus salarios, lo que agrava aún más la situación y afecta negativamente la calidad educativa.
Otro aspecto crítico es el Plan de Alimentación Escolar (PAE). Padres y estudiantes han manifestado su preocupación por la calidad y cantidad de los alimentos proporcionados. Se reportan casos de alimentos en mal estado, así como cantidades insuficientes para cubrir las necesidades nutricionales de los alumnos. Esta situación no solo compromete la salud y el bienestar de los estudiantes, sino que también puede afectar su rendimiento académico.
Además, se han evidenciado serias deficiencias en el transporte escolar. Se denuncia el sobrecupo en los vehículos, la ausencia de elementos de seguridad adecuados y el comportamiento inapropiado por parte de algunos conductores. Estas condiciones ponen en riesgo la seguridad de los estudiantes durante sus trayectos hacia y desde la escuela, generando una creciente preocupación entre los padres de familia.
A pesar de los acuerdos establecidos con la Secretaría de Educación, parece que los compromisos no están siendo cumplidos por el operador encargado de prestar servicios en la institución. Esto ha generado una profunda desconfianza entre la comunidad educativa y ha dejado en evidencia la falta de control y vigilancia por parte de la administración distrital.
En este contexto, los padres de familia y voceros de la comunidad educativa exigen una pronta solución por parte de las autoridades competentes. Es fundamental que se tomen medidas inmediatas para garantizar un ambiente educativo seguro y de calidad para todos los estudiantes de la Institución Educativa Quinto Centenario. El futuro de miles de jóvenes está en juego, y es responsabilidad de todos velar por su bienestar y desarrollo académico.
Sin embargo, la preocupación se ve aún más agudizada por el hecho de que la alcaldía está canalizando recursos hacia colegios con buena infraestructura, dejando a los más necesitados en el abandono. Esta situación plantea interrogantes sobre la equidad en el acceso a la educación y la distribución justa de los recursos públicos destinados al sector educativo. Es urgente que se redoblen los esfuerzos para atender las necesidades de aquellos colegios que más lo necesitan y garantizar que todos los estudiantes tengan acceso a una educación de calidad, independientemente de su ubicación o condición socioeconómica.