Por más de 30 días, los habitantes de Nacho Vives han sufrido la escasez de agua potable, afectando gravemente la vida diaria de la comunidad. La falta de suministro ha generado una serie de dificultades, desde la imposibilidad de mantener la higiene básica en hogares y establecimientos educativos hasta tener que recurrir a la compra de bolsas de agua para cubrir las necesidades más básicas. Todo esto llevó a los residentes a tomar medidas extremas para llamar la atención de las autoridades. A pesar de los esfuerzos de la empresa de servicios públicos, la situación sigue siendo crítica y los habitantes continúan luchando por acceder a un recurso vital.
Las madres comunitarias se han visto afectadas, ya que la falta de agua dificulta su capacidad para brindar cuidado a los niños y mantener la higiene necesaria. “La verdad, llevamos un mes sin agua potable. No tenemos suministro. Los niños van al baño, hacen sus necesidades, hay que lavarles las manos y entonces así no podemos estar. No solo porque sea madre comunitaria y prestamos una atención de ocho horas, también los vecinos, la comunidad entera, estamos todos totalmente afectados. Estamos comprando pacas de agua para hacerle los alimentos a los niños, que a veces los sueldos nos alcanzan para estar comprando agua. Nos toca salir hacer huelga porque tenemos que asear a los niños si van al baño, ya que tenemos niños pequeños que se hacen de sus necesidades y nos toca lavarlos y a veces no tenemos esa agua”. Indicó María Claudia Castro Madre Comunitaria
Asimismo, en vista de que la empresa no les da solución, les está tocando ir a otros sectores a buscar un poco de agua. “Es muy grave lo que estamos pasando los habitantes del barrio Nacho Vives. Llevamos muchos días sin agua y nos está tocando ir a otros barrios como 20 de Julio y Los Almendros para pedir que nos regalen o nos vendan un poquito de agua. Y esto nos tiene enfermos porque es muy pesado traer esos tanques de agua. Por eso realizamos la protesta porque necesitamos que nos colaboren”, agregó Luis Uribe, habitante del sector.





La situación también está teniendo un impacto significativo en la economía de los residentes, quienes además de enfrentar el costo adicional de comprar agua, deben pagar por un servicio que no están recibiendo adecuadamente. La respuesta de la alcaldía ha sido considerada insuficiente por parte de los residentes. A pesar de los intentos de abordar la situación mediante el envío de carros tanque, el suministro proporcionado no es adecuado para cubrir las necesidades de toda la comunidad.