El juez tercero de conocimiento de Funza ha tomado una decisión clave en el caso de las muertes de Jorge Enrique Pizano y su hijo Alejandro, ocurridas en noviembre de 2018.
Este caso, envuelto en misterio y tragedia, ha sido relacionado con el escándalo de corrupción de Odebrecht en Colombia, donde la empresa brasileña obtuvo contratos de obras públicas a través de sobornos.
La decisión del juez surge en medio de críticas hacia la Fiscalía General de la Nación por no cumplir con su deber en la investigación de estas muertes. El caso Pizano ha puesto en evidencia la necesidad de esclarecer las ramificaciones del escándalo de Odebrecht, que ha implicado a figuras prominentes como el Grupo Aval y Néstor Humberto Martínez, exfiscal general de la nación.
Los defensores de la familia Pizano han sugerido que las muertes de Jorge Enrique y Alejandro fueron criminales, lo que plantea interrogantes sobre quién podría haber querido silenciar al controller del proyecto Ruta del Sol II y por qué la investigación de la Fiscalía se cerró rápidamente.
El caso ha superado en oscuridad y suspenso a muchos casos de ficción, pero la esperanza ahora radica en una investigación diligente y completa.
Es esencial despejar las dudas que rodean este caso para llegar a las certezas que una investigación adecuada debe proporcionar.
