La plenaria del Senado de la República no pudo avanzar en el trámite de la reforma pensional, porque fue aprobada una proposición que exige realizar una sesión informal para escuchar las posiciones de gremios y expertos sobre la iniciativa, antes de continuar con su discusión.
Esto fue una nueva derrota para el Gobierno de Gustavo Petro y su coalición en el Congreso, que no logró conseguir las mayorías para negar esta propuesta de la oposición que hace parte de su estrategia encaminada a hundir la reforma.
«Es fundamental que se escuche a los ciudadanos, a los gremios, a los sindicatos, a los jóvenes que van a ser afectados con esta reforma pensional, por eso impulsamos esta proposición que fue aprobada para que se suspenda el debate, para que podamos tener una sesión en la que escuchemos a todos los ciudadanos y tengamos mayores elementos de juicio para votar la ponencia”, dijo el Senador Carlos Fernando Motoa.
Entre tanto, el senador David Luna negó que se trate de una estrategia dilatoria de la oposición para torpedear el debate del proyecto y confesó que es una estrategia para proteger el ahorro pensional de los ciudadanos.
Con este panorama, la discusión en segundo debate de la reforma pensional volvió a aplazarse y será puesta en el orden del día de la plenaria después de Semana Santa.