Este martes, 27 de febrero, vence el plazo para que la justicia colombiana cumpla las garantías que exigió el Supremo Tribunal Federal de Brasil para poder autorizar la extradición de Jaime Saade Cormane a Colombia, donde hace más de dos décadas tiene pendiente una condena por el asesinato de la joven barranquillera Nancy Mestre Vargas.
Para extraditar a Saade, las autoridades brasileñas han pedido como garantía que se le compute el tiempo que él ha estado recluido en Brasil y que no se le compute el delito de acceso carnal violento, aunque esto último no representa una variación de la condena de más de 24 años de prisión que le fue impuesta.
Todo lo anterior debe ser confirmado y comunicado por el Juzgado Primero de Ejecución de Penas de Barranquilla a más tardar este martes, de lo contrario, Saade recobraría su libertad y el crimen de Nancy, 30 años después, aún seguiría en impunidad.
“El condenado Jaime Saade puede quedar en libertad si el Estado colombiano no se pronuncia de manera inmediata sobre las garantías y condiciones solicitadas por el Supremo Tribunal Federal de Brasil para extraditarlo. ¡Me preocupa!”, expresó el abogado Raúl Romero, defensor de la familia de la víctima.












