La Procuraduría General de la Nación solicitó a la JEP recopilar toda la información relacionada con procesos disciplinarios que se adelantaron en los batallones de la Tercera Brigada del Ejército, en Cauca y Nariño, contra soldados que habrían sostenido relaciones sexuales consentidas con mujeres indígenas en instalaciones militares, cuando en realidad las mujeres habrían sido víctimas de violaciones.
La Delegada ante la JEP también solicitó que se investigue la violencia secundaria ocurrida alrededor de estos casos, para determinar la revictimización padecida por las afectadas.
Lo sufrido por esta persona no puede considerarse de manera independiente a la dinámica del conflicto armado y el ejercicio de control territorial, asegura la Procuraduría.
Esta solicitud del Ministerio Público hace parte del documento de observaciones que hizo la delegada ante el tribunal de paz frente a las declaraciones voluntarias rendidas por cuatro exintegrantes de la fuerza pública (dos soldados y dos policías) que violaron a una mujer indígena y posteriormente la intimidaron para que no denunciara.