Israel bombardeo este Martes el norte de la Franja de Gaza, dejando al menos 120 palestinos muertos.
Según las versiones preliminares este nuevo ataque tenia como objetivo atacar a las fuerzas del grupo islamista Hamás, pero también han afectado a zonas densamente pobladas por civiles.
Mientras tanto, las tropas israelíes y las milicias en el sur del Líbano continúan intercambiando fuego.
En los últimos días, las fuerzas de Defensa de Israel han atacado más de 400 objetivos terroristas en la Franja de Gaza, según informa un portavoz del Ejército israelí.
Estos ataques han incluido a hombres armados de Hamás que se preparaban para realizar ataques contra Israel. Además, se han atacado infraestructuras terroristas y bases de operaciones en varios vecindarios de Gaza.
Los ataques israelíes también han alcanzado un túnel utilizado por los milicianos de Hamás y centros de mando ubicados en mezquitas. La situación en Gaza es alarmante, ya que los residentes no han podido o no han querido evacuar a pesar de los constantes ataques.
Hasta el momento, se estima que más de 5.200 personas han muerto en la Franja de Gaza, y el 70% de ellas son niños, mujeres y ancianos.
Los civiles en Gaza se enfrentan a condiciones extremadamente difíciles debido al bloqueo total de suministros por parte de Israel ya que el acceso a agua, alimentos, medicinas y electricidad se encuentra colapsado, lo que ha llevado al colapso de hospitales y al brote de enfermedades como la sarna y la viruela.
Además, el acceso a la ayuda humanitaria es limitado y no incluye combustible para los generadores de los hospitales.
En medio de esta escalada de violencia, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, se encuentra en Israel con el objetivo de buscar una solución y rebajar la tensión en la región.
La situación en Oriente Próximo sigue siendo volátil, y las víctimas civiles continúan aumentando.
