En Turbana, norte de Bolívar, hay conmoción por la insólita muerte de Pedro Tomás Miranda Martínez, un campesino de esta población que le apasionaba cultivar. Tenía 76 años.
Hay conmoción por lo sucedido, pues su muerte llegó de una manera que, en Turbana, jamás nadie imaginó. En redes sociales hay mensajes de condolencias y fortaleza para sus familiares, y destacan la gran persona que fue en vida.
Una versión que se ha dado a conocer fue que don Pedro Tomás hizo lo que acostumbran hacer los labriegos antes de hacer sus sembrados, bien sea yuca, ñame, plátano o cualquier otro producto.
Lo que se ha conocido es que comenzó esta labor después de 10 de la mañana del martes 28 de marzo en su predio que está en las afueras de Turbana, pasando el barrio Nuevo Bosque. Lo hizo cuando había poco viento en la zona.
Sin embargo, hay quienes creen que el clima le jugó una mala pasada y los vientos comenzaron a hacerse más fuertes, e incluso cambiando de dirección.
En la tarde, las llamas comenzaron a esparcirse rápidamente por todo el terreno, por lo que el adulto mayor intentó salir del lugar, pero se le hizo imposible.
Además, la dificultad se le hizo mayor para poder poner su vida a salvo, ya que lamentablemente el hombre sufría una discapacidad en una de sus piernas, según se conoció. El fuego y el humo lo alcanzaron y desafortunadamente murió calcinado.
Liceth Pájaro, comandante del Cuerpo de Bomberos de Turbana, explicó que ellos recibieron el llamado para atender la emergencia, pero cuando llegaron al sitio ya el señor había fallecido. “Lo que hicimos fue controlar la quema para que esta no siguiera expandiéndose por todo el terreno”.
El hoy difunto vivía en la calle Las Flores y será sepultado hoy en el cementerio municipal de Turbana.
