En Filadelfia, Estados Unidos, también es escucha el retumbar de los tambores que anuncian la llegada del Carnaval de Barranquilla y con él se alista Claudia Tovar Téllez, designada como la Sra. Reina Internacional de las carnestolendas en la ciudad norteamericana y quien es la encargada de exaltar el folclor y la tradición de la festividad cultural más grande de Colombia.
La Fundación Arte Sin Límites de Barranquilla, presidida por el gestor cultural Carlos Augusto Arévalo Franco, fue la encargada de la designación de la soberana, quien se ha mostrado comprometida con la labor y ha puesto en marcha tres de sus objetivos como reina: realizar obras sociales que contribuyan a fortalecer el tejido social, el empoderamiento de la mujer y la atención a hombres y mujeres de la tercera edad.
“Mi misión como reina es transmitir mi alegría a todos aquí en el exterior, mostrando mi folclor y dando a conocer nuestro Carnaval que es ‘Patrimonio Cultural de la Nación’ por el Congreso Nacional de Colombia, y en el 2003 recibió por parte de la Unesco el título de ‘Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad’”, expresó Claudia.
La nueva Sra. Reina Internacional nació en Barranquilla y desde muy niña estuvo vinculada con el carnaval, además se inclinó por el baile, el teatro e hizo parte de los centros literarios de su colegio. También fue escogida para ser porrista del Junior de Barranquilla y posteriormente de la Selección Colombiana de Fútbol.
Tras estudiar en Bogotá Radio y Televisión, forjó una carrera como comunicadora social y periodista; Claudia ha estado vinculada a los medios de comunicación entre los Estados Unidos y Barranquilla, actualmente tiene un programa de Radio en Magazín Internacional New York y es corresponsal de Magazín Espectacular para Colombia.
Ser hija de La Arenosa le ha permitido a Claudia Tovar dar un mensaje claro de lo que es el Carnaval de Barranquilla y buscar estrategias que le ayuden a contagiar a los diferentes públicos en Filadelfia, Estados Unidos, con el propósito de promoverlo ahí y en el resto del mundo.
