De la alimentación y la agricultura

Por Raúl Arzuza Cuesta

La alimentación y la agricultura se encuentran en la actualidad en una encrucijada. Si volvemos la vista atrás, vemos que, a lo largo de las últimas décadas, la producción agrícola ha mejorado notoriamente a la hora de cubrir las necesidades alimentarias de una población mundial en crecimiento.

Sin embargo, el progreso a menudo ha venido acompañado de consecuencias sociales y medioambientales, como la escasez de agua, la degradación del suelo, presiones sobre los ecosistemas, la pérdida de biodiversidad, la disminución de la población de peces y bosques y unos altos niveles de emisiones de gases de efecto invernadero. El potencial productivo de nuestra base de recursos naturales ha sufrido daños en muchos lugares del mundo y esto ha puesto en entredicho la fertilidad del planeta.

Hoy en día 815 millones de personas padecen hambre y uno de cada tres, malnutrición, lo que refleja el desequilibrio del sistema alimentario. Las migraciones por necesidad han aumentado hasta niveles sin precedentes.en los últimos 70 años debido a que la cohesión social y las tradiciones culturales de las poblaciones rurales se ven amenazadas por una combinación de factores como son tener un acceso limitado a la tierra y a los recursos y el creciente número de crisis, conflictos y desastres naturales, muchos de ellos consecuencia del cambio climático.

Si miramos hacia el futuro, el camino hacia una prosperidad inclusiva está claramente marcado por la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Superar los complejos desafíos a los que se enfrenta el mundo requiere de una acción transformadora, la adopción de los principios de la sostenibilidad; abordar las causas fundamentales de la pobreza y del hambre para no dejar a nadie atrás.

Como elemento principal de conexión entre las personas y el planeta, la alimentación y la agricultura pueden contribuir a lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible(ODS). Con una buena alimentación, los niños pueden estudiar y aprender, las personas pueden llevar una vida sana y productiva, y las sociedades pueden prosperar. Si nutrimos nuestra tierra y apostamos por una agricultura sostenible, tanto las generaciones presentes como las futuras serán capaces de alimentar a una población creciente. La agricultura, incluyendo los cultivos, la ganadería, la acuicultura, la pesca y los bosques, es el sector que más personas emplea en el mundo, el mayor sector económico en muchos países y, además, es la fuente principal de alimentos y de ingresos de aquellos que viven en pobreza extrema.

La alimentación y la agricultura sostenibles tienen un gran potencial para revitalizar los paisajes rurales para generar crecimiento inclusivo en los países y para lograr un cambio positivo en el marco de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.

Se debe tener principalmente en mente a los responsables de políticas nacionales y a los agentes de desarrollo, y proponer una serie de pasos para acelerar la transformación hacia una alimentación y una agricultura sostenible basados en la evidencia, la experiencia y el conocimiento técnico y colectivo que reside en la FAO(Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura). Estas acciones siguen la estela de la Agenda para el Desarrollo Sostenible 2030, que quiere lograr un desarrollo sostenible en el que la alimentación y la agricultura, los medios de subsistencia de las personas y la gestión de los recursos naturales no se traten por separado, sino como una única cuestión. Se busca un futuro en el que no solo nos fijemos en los objetivos a alcanzar, sino en los medios para hacerlo. Un entorno en el que los actores públicos y del sector privado participen a la hora de legitimar, configurar y trabajar para encontrar soluciones para el desarrollo.

Integrar la alimentación y la agricultura sostenibles en las estrategias de desarrollo nacionales y en los planes de acción requiere de un proceso.

Integrar la alimentación y la agricultura sostenibles en las estrategias de ODS que funcionen es fundamental. Si bien no se conciben como un estándar, la FAO ofrece a los encargados de adoptar decisiones una posible forma de proceder en el camino hacia la consecución de los ODS, lo que complementa el proceso esbozado por la Guía de Referencia para la Integración de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible del GNUD(Grupo para el Desarrollo de las Naciones Unidas), una plataforma común para las ODS a nivel país. Fuente editada: “Resumen de: Integrar la alimentación y la agricultura sostenibles”, en la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura. OBJETIVOS DE DESARROLLO SOSTENIBLE trabajamos por el hambre a cero.

Así que, el Gobierno del señor Presidente economista Gustavo Petro, debe tomar atenta nota de lo de las líneas precedentes para aplicarlas a su futura Reforma Agraria. Para bien del campesinado colombiano y para garantizar una buena alimentación para todos los habitantes del país basado en las directrices de la FAO y ODS.

*Ingeniero Civil egresado Universidad de los Andes, Colombia

Capitán de Corbeta Reserva Naval Armada Nacional de Colombia

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@raul_arzuza