Seis meses después de que la Contraloría General de la República hizo un llamado al Instituto Nacional de Vías, Invías, frente al robo de elementos del nuevo Puente Pumarejo, la situación es la misma. “Persiste sin solución la pérdida de tornillos y tuercas del aseguramiento del sistema de anclaje de tirantes al tablero principal del puente Pumarejo”, dice el ente de control.
Por ello alertó nuevamente al Invías sobre estas anomalías que pueden traer serios riesgos y terminar comprometiendo la estabilidad estructural del sistema de tirantes del puente.
“Siendo Invias el propietario y responsable directo del cuidado, operación y mantenimiento de este muy importante puente, nuevamente le solicitamos realizar las gestiones necesarias y suficientes que permitan subsanar adecuada y prontamente estas anomalías e informar de ello a esta Contraloría Delegada”, le pidió el Contralor Delegado para el Sector de Infraestructura, Luis Fernando Mejía Gómez, al director general de esta entidad, Juan Esteban Gil, en comunicación que le remitió el pasado 28 de junio.
La entidad sostiene que la pérdida de los elementos mencionados constituye un riesgo que a esta fecha aún no ha sido solucionado satisfactoriamente.
Como consecuencia de lo anterior, los componentes externos e internos de los anclajes afectados (tubo antivandálico y demás elementos interiores) continúan expuestos a serios riesgos de corrosión, degradación física y/o conflagración, lo cual, según el Interventor Consorcio Vial Pumarejo, puede comprometer la debida estabilidad estructural del sistema de tirantes del nuevo puente.
Adicionalmente, la Contraloría mostró también preocupación por el Sistema de Instrumentación y Monitoreo del Puente Pumarejo, dado que lleva en operación 2 años y medio sin que haya funcionado, lo cual ha impedido que se conozcan los resultados de los parámetros de desempeño que especificó su diseñador estructural y, lo que es peor, sin que tampoco haya certeza de la fecha en que el INVIAS lo pondrá en adecuado funcionamiento.
Las deficiencias detectadas
A principios de este año la CGR finalizó una Auditoría de Cumplimiento a contratos del Invías donde determinó un hallazgo con presunta incidencia fiscal por 25.296 millones de pesos, correspondiente al contrato de construcción del puente Pumarejo, generado por deficiencias en la gestión para garantizar el funcionamiento permanente de los sistemas de iluminación e instrumentación de esta estructura, la cual fue puesta en funcionamiento desde diciembre del año 2019.
En esa misma auditoría se evidenciaron deficiencias de calidad en algunos elementos de las estructuras entregadas del puente, producto de falencias en el proceso constructivo y en la supervisión. Y, adicionalmente, se indicó que el Invias no estaba ejerciendo eficazmente la función de adecuada salvaguarda de los activos derivados de las obras construidas, dado el hurto continuado y vandalismo sobre elementos del puente.