El presidente de la Junta Directiva de Fendipetróleo, Jairo Gómez Fontalvo, advirtió que el nuevo reglamento técnico para los distribuidores minoristas de combustibles del Ministerio de Minas y Energía, que empezó a regir el pasado 30 de marzo, podría quebrar a miles de pequeños y medianos propietarios de estaciones de servicio.
El ejecutivo explicó que este reglamento consiste en una relación de requerimientos para el funcionamiento de las estaciones de servicio, que, a su vez, implicaría una serie de nuevas inversiones a cargo de los propietarios de las EDS, inversiones estas que superarían los 200 millones de pesos por estación.
Gómez Fontalvo dijo que están de acuerdo con estas nuevas exigencias pero que dado que el 70% de las estaciones de servicio se encuentra en el régimen regulado, considera que el Gobierno Nacional tiene que incorporar los costos de la implementación de este reglamento técnico en el margen de rentabilidad o sea en la tarifa o remuneración.
“Previo a la implementación del reglamento técnico debe realizarse un estudio donde se informe cuál es el impacto económico de la implementación de este reglamento y que estos costos sean asumidos vía tarifa”, afirmó Gómez.
Afirmó que por este motivo, en reiteradas ocasiones, se le ha solicitado al Gobierno Nacional la suspensión inmediata de dicho reglamento, puesto que al no darse el reconocimiento de los costos vía tarifa se atenta gravemente con la sostenibilidad de estos negocios y con la prestación del servicio público de la distribución de combustibles. De acuerdo al gremio, sería el Gobierno Nacional el responsable de la quiebra de miles de estaciones de servicios.
“Desde el año 2006, los distribuidores minoristas han hecho un esfuerzo gigante en recursos económicos, de personal y tecnología para cumplir con la regulación. El sector no se opone a tener unos mejores estándares para la prestación del servicio público, pero debe ser un proceso sistemático, viable en su aplicación y de construcción conjunta que permita cumplir con los objetivos propuestos o de lo contrario será un proceso fallido, que terminará perjudicando no solo a las estaciones de servicio, sino a todos los consumidores del país”, anotó el gremio.
Así las cosas, Fontalvo dijo que de carácter urgente solicitan al Ministerio de Minas y Energía que antes de establecer estos nuevos requerimientos debe atender, junto a la Creg, los costos de operación de las estaciones de servicio, ya que estos están por encima de los precios máximos establecidos por dicho ministerio para la venta de combustible en aquellas regiones en que aplica el régimen de libertad regulada.
“Esta decisión de implementar un nuevo reglamento técnico agrava la guerra de precios que hoy se vive en las principales ciudades del país y que ha llevado a la quiebra a miles de pequeñas y medianas estaciones de servicio en dichas locaciones”, anotó.