«Ataque de la Primera Línea a Hotel Radisson es un reflejo de lo que quiere la izquierda con el país»: Cabal

A través de un video, la senadora por el Centro Democrático, María Fernanda Cabal rechazó los ataques violentos esta tarde al Hotel Radisson en Bogotá, donde se realizaba el Foro de Madrid y señaló como responsables a los integrantes de la llamada ‘Primera Línea’.

«Recibo información que terroristas de la Primera Línea destruyeron las ventanerías del hotel Radinsson donde se llevaba a cabo el Foro Madrid, el foro de quienes defienden la libertad. Queremos hacer un llamado, no solo a las autoridades locales sino también a la alcaldesa Claudia López a garantizar el evento y a los asistentes internacionales», indicó.

Cabal también precisó que la protección también debe extenderse para el presidente Duque, «porque lo que está sucediendo es que está en juego la imagen del país».

«Esto es lo que nos espera con estos candidatos podridos de la Izquierda radical», puntualizó.

El evento, que busca servir de contrapeso al llamado Foro de Sao Paulo, es organizado por líderes políticos del partido de ultraderecha español y convoca representantes de grupos conservadores de todo el continente. La senadora colombiana María Fernanda Cabal rechazó los ataques y señaló como responsables a los integrantes de la Primera Línea.

Videos en redes sociales dan cuenta de la presencia de uniformados rodeando el edificio y personal del hotel recogiendo los vidrios rotos.

Mientras el encuentro se llevaba a cabo en Bogotá, varios jóvenes llegaron a manifestarse en contra del evento. Aunque el lugar contaba con la seguridad de varios uniformados ubicados a las afueras del hotel, registros en video publicados en Twitter muestran el momento en que algunas personas lanzan piedras al hotel y destruyen varios ventanales y puertas.

Para muchos políticos del país, la Primera Línea no es más que la carne de cañón de algo que se llama Revolución Molecular y que funciona para las ciudades.

El significado de este concepto adaptado a la política de seguridad considera la ‘revolución molecular disipada’ como una forma de resistencia al sistema, que a través de una guerra de guerrillas urbanas desarticuladas busca imponerse al establecimiento.

Al igual que otros términos, como ‘castrochavismo’ o ‘ideología de género’, son ideas en las que se plasma el concepto del ‘otro’ en abstracto. Esta abstracción termina por convertir nuestra interpretación de manifestaciones masivas, compuestas por una comunidad de ciudadanos con necesidades diferentes, en una sola masa guiada por una única idea desestabilizadora.