Como urgente calificó el Defensor del Pueblo Carlos Camargo la ejecución de un plan de choque humanitario para superar la crisis migratoria que se registra en el municipio de Necoclí, Antioquia, donde se concentran más de 15 mil extranjeros en tránsito hacia Centro América y Estaos Unidos.
Camargo indicó que de hecho ya le pidió a varias entidades que tomen medidas inmediatas y estructurales para conjurar la grave situación humanitaria.
El Defensor del Pueblo hizo presencia este jueves en el municipio de Necoclí para dialogar directamente con la comunidad y verificar las condiciones humanitarias de los 15.000 migrantes extracontinentales en tránsito que se encuentran represados desde hace más de 10 días en este municipio.
Advirtió que algunos migrantes denunciaron mafias que les venden ‘paquetes turísticos’ para hacer el recorrido desde Ipiales, en Nariño, con cobros que llegan a los 300 dólares, para pasar la frontera, a lo cual acceden por la necesidad de continuar su tránsito hacia el norte del continente», indicó el Defensor.
Camargo explicó que, según los migrantes con quienes habló, esta sería una red internacional que viene desde Chile, que los va moviendo por diferentes puntos del recorrido y a los que deben pagar una especie de ‘peajes’, y de la cual hacen parte transportadores y lugares de hospedaje.
En su paso por Necoclí, los migrantes también le expresaron su gran preocupación por las acciones de los grupos armados organizados contra ellos, particularmente en la zona selvática de frontera con Panamá.
Al respecto, «hago una solicitud a todos los defensores del Pueblo de Iberoamérica, particularmente de Ecuador y Panamá, con el fin de revisar los mecanismos de cooperación necesarios para enfrentar esta crisis migratoria de carácter internacional, y que se ponga fin a la vulneración de los derechos humanos de los migrantes que transitan por el continente», enfatizó el Defensor del Pueblo.
Al finalizar la visita, Carlos Camargo les reiteró a los representantes de los migrantes y a las autoridades locales que los funcionarios de la Defensoría seguirán brindando el acompañamiento incondicional a los migrantes que hacen tránsito por el país, y que desde la Regional Urabá Darién se monitorearán las medidas que adopten las autoridades municipales, departamentales y nacionales, para que se garanticen los derechos de esta población.
La Defensoría del Pueblo establecerá una ruta humanitaria interna con los defensores regionales para hacerle seguimiento al avance del tránsito migratorio extracontinental, el cual generalmente inicia en el departamento de Nariño y concluye en la frontera con Panamá. Lo que se busca con este seguimiento es evitar vulneraciones de derechos humanos y aglomeraciones que pongan en riesgo la salud en medio de la pandemia.
«La ruta, que se implementará bajo principios humanitarios, tendrá estaciones habilitadas para que las instituciones competentes acompañen e intervengan para la garantía de los derechos de los migrantes en tránsito. Sin embargo, varias entidades deben tomar medidas urgentes y estructurales para enfrentar la crisis migratoria que actualmente se vive en Necoclí», indicó el Defensor del Pueblo.
La Defensoría le pidió al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) que verifique el parentesco de niñas, niños y adolescentes migrantes para prevenir que aquellos que no están acompañados sean víctimas de trata, explotación sexual comercial u otras situaciones que vulneren sus derechos.
Ante la solicitud del Defensor a Migración Colombia para que se realice una comisión intersectorial de migración en la zona, su director indicó que se llevaría a cabo la próxima semana. Allí también estará la Defensoría para hacer el respectivo seguimiento.
Finalmente, la Defensoría del Pueblo le solicitó a la Armada Nacional reforzar el control de embarcaciones que transportan a los migrantes, especialmente en las horas de la noche, para evitar situaciones de riesgo.