*En la mira de los investigadores están varios soldados, un cabo y mandos medios del Ejército.
Las autoridades que adelantan las investigaciones por el atentado ocurrido al interior de la base militar en Cúcuta, analizan una posible complicidad por parte de mandos medios del Ejército, un cabo y varios soldados.
Estiman las investigaciones que el atentado no iba dirigido a los militares estadounidenses que se encontraban en las instalaciones, sino que buscaba perjudicar al grupo EDA, una estructura de apoyo a la Fiscalía General de la Nación, que funciona al interior del Ejército.
Como se ha dicho desde un principio todo parece indicar que el carro bomba fue instalado por el Ejército de Liberación Nacional, ELN. Según los investigadores, así se pudo determinar por el «modus operandi» que concuerda con el del atentado perpetrado en la Escuela de Cadetes General Santander en el año 2019.
También se reveló que se «gemelió» la camioneta que ingresó de la Brigada 30 y se encuentra claro quienes compraron y vendieron el vehículo. Se adelantan algunas capturas de los responsables.