No cesan los atropellos contra las comunidades indígenas Wayuu de la Guajira

¿Se llevarán el arroyo Bruno?

Comentarios del Dr. Luis Alonso Colmenares Rodríguez

La honorable Corte Constitucional produjo una importante decisión a través de la Sentencia SU698-17 relacionada con la desviación del arroyo Bruno en La Guajira.

La Corte falló a favor de las comunidades indígenas wayuu de la zona de La Horqueta, La Gran Parada y Paradero, contra Cerrejón, el MinInterior, Corpoguajira, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales – ANLA y el MinAmbiente,  salvaguardando los derechos fundamentales al agua, la identidad, integridad y diversidad étnica, la seguridad alimentaria, así como a la consulta previa e igualdad, teniendo en cuenta que otras comunidades si fueron consultadas para llevar a cabo la ejecución del proyecto de desviación del referido arroyo.

Los demandantes argumentaron que la desviación del arroyo Bruno lesiona el ambiente porque afectaría el corredor de bosque tropical  entre los Montes de Oca y la Sierra Nevada de Santa Marta, amenaza el abastecimiento de agua para las comunidades indígenas y las poblaciones de Albania y Maicao que transportan el agua mediante carrotanques.

La Corte concluyó en unas dificultades e incertidumbres que no estaban resueltas frente a los impactos ambientales y sociales del proyecto de desviación del arroyo Bruno, lo que «constituye una amenaza concreta, cierta y directa a los derechos al agua, a la salud,  la seguridad y soberanía alimentaria de las comunidades vecinas al arroyo Bruno», con el apoyo de técnicos y conceptos de expertos, además de las pruebas recaudas directamente mediante una inspección judicial.

En tal sentido la Corte resalto, entre otros aspectos, las consecuencias de intervenir un bosque seco tropical y estado del ecosistema; el valor biológico de la cuenca y efectos del cambio climático y del calentamiento global; garantía de las funciones culturales, de abastecimiento, regulación y mantenimiento que cumple el arroyo; además del impacto aguas arriba y oferta hídrica por la desviación del mismo.

La Corte ordenó suspender las obras materiales del proyecto de desviación mientras se realiza un estudio técnico que responda a las incertidumbres establecidas, de manera que se pueda valorar la viabilidad ambiental de la desviación del mencionado arroyo, diseñar un cronograma detallado y razonable de sus actividades, bajo la dirección de la Mesa de Trabajo Interinstitucional que había ordenado constituir el Tribunal Administrativo de la Guajira y el Consejo de Estado, con la participación de varias entidades del gobierno nacional, Organismos de control, Departamento de La Guajira y los municipios de Maicao y Albania.

La Procuraduría, Defensoría del Pueblo y Contraloría deben vigilar y acompañar el cumplimiento de las órdenes de la sentencia.

En tal sentido la Contraloría ya rindió un primer informe en el cual concluye que “Como resultado de la auditoría realizada, la Contraloría General de la República emite un concepto de INCUMPLIMIENTO MATERIAL ADVERSO en los aspectos evaluados…”, al establecer que no existe un plan de trabajo que se constituya en la hoja de ruta para los actores que hacen parte de la Mesa Interinstitucional de Trabajo; debilidades en relación con las fuentes de información, soportes documentales y datos considerados en las evaluaciones realizadas, debilidades en la evaluación de los posibles impactos, y debilidades en la determinación de las conclusiones plasmadas en el informe para sustentar la decisión de mantener el arroyo Bruno en el nuevo cauce, así mismo  el incumplimiento de los compromisos adquiridos por Corpoguajira en el Plan de Mejoramiento para superar los efectos sobre el medio ambiente y los recursos naturales ocasionados por los permisos y autorizaciones otorgados, los cuales persisten en el tiempo, sin que se hagan efectivas las compensaciones respectivas.

Y es que ante el panorama de incumplimiento institucional que se observa, existen suficientes razones para las dudas y desconfianza de la gente, porque ante la inactividad de la Mesa de Trabajo Interinstitucional se puede creer que en cualquier momento reactiven el proyecto de desviación y se lleven el arroyo para otra parte del mundo…

Así es con todo en La Guajira, ¿para qué nos echamos mentiras y nos engañamos nosotros mismos?

Seguimos atentos.

@LcolmenaresR

#LaOpinionDeColmenares

D.A.