ROBERTO ESPER REBAJE, un intrépido visionario

*Con su partida nos quedó su pensamiento como símbolo de la dignidad periodística y el Diario LA LIBERTAD, como centro de gravedad del Caribe colombiano.

Por ITALO IGUARAN PERTUZ

Inmensa tristeza nos produjo el fallecimiento de Don Roberto Esper Rebaje el 24 de febrero de 2017, sus ejecutorias en el mundo del comercio, en la prensa con el Diario LA LIBERTAD, hoy cumpliendo 42 años de existencia, La Verdad de Cartagena y El  Espacio de Bogotá, en la radio con la Cadena Radial La Libertad, lo convirtieron en el mayor gestor empresarial, en los medios de comunicación de todos los tiempos en Barranquilla y Colombia, superando adversidades, derribando obstáculos, enfrentando tempestades a punta de perseverancia, dedicación, mística y compromiso.

Con su partida quedó su pensamiento como símbolo de la dignidad periodística y el Diario LA LIBERTAD, como centro de gravedad del Caribe colombiano, Don Roberto era optimismo que sabía  nutrir la ilusión de que la voluntad de servicio a la comunidad se empoderara a través de la prensa y en especial ese servicio para la sociedad en general.

En el decurso de su vida, hay personas que se convierten en gestoras de sueños hechos realidad cuya personalidad es íntegra, que su accionar se recuerda y se guarda con nitidez y nostalgia, esto nos sucede a todos los que tuvimos la fortuna de conocer y tratar a Don Roberto Esper Rebaje.

Don Roberto representó una investidura de la comunicación, representó la liturgia de la palabra, en cada uno de sus editoriales, por eso es muy honroso escribir este modesto pero sincero mensaje, con el fervor que infunde el hecho de haber sido su colaborador durante más de 50 años.

Porque él infundía apoyo a las transformaciones profundas y veloces, representaba la conducta de nuestro ser barranquillero y costeño, del renacer de la creencia, del reencuentro de la misión de la prensa con la justicia social, él representaba el  colectivo cotidiano del ciudadano común y corriente.

Por eso en este día destacamos una vez más la nobleza de sus ideas, su colaboración sincera y franca con la ciudad de Barranquilla, con la Región Caribe y el país, la entrega a su tesonero trabajo… y resaltamos su nobleza, lo que él era como persona en su tradición y su espíritu… esa historia que él llegó a construir y que deberá conservarse para responder a su legado.

Roberto Esper Rebaje fue el relator de un recorrido de 91 años de su vida, la que se truncó el 24 de febrero del año 2017.

El era, en toda la magnitud de la expresión, un ser humano íntegro, buen amigo, excelente padre, incansable lector, amante de la paz, de una memoria prodigiosa, condición que lo convirtió en un gran conversador, sensible y preocupado por la problemática social de Barranquilla y el país que tanto le interesaba.

De sólida formación cristiana, honesta y servicial, su fallecimiento dejó un vacío no solo en su familia sino en todos los que tuvimos la fortuna de tratarlo y conocerlo.

Don Roberto para unos, Robertico para otros, fue un hombre que en todo momento se constituyó en un gran ejemplo para las presentes y futuras generaciones por su sencillez y decencia en el trato para con los demás; por su rectitud y mano firme en sus decisiones y honorabilidad en el desempeño de su vida cotidiana, su visión futurista y emprendedora lo convirtió en un visionario de tiempo completo.

Don Roberto, le prometemos que  siempre tendremos su presencia en nuestras vidas, su recuerdo siempre nos producirá una sensación especial de su bondad, porque su calidad humana fue única, el liderazgo que ejerció durante su vida fue y será fuente de inspiración para todos los que tuvimos la grandiosa oportunidad de tratarlo y estar a su lado por mucho tiempo. 

Soñaba en grande como grande es su legado. Le recordaremos por siempre, querido jefe. Gracias por todo lo que le diste a la ciudad de Barranquilla

Por eso, nuestra promesa, no debe ser otra que proseguir la vocación de servicio y la capacidad de trabajo que siempre nos enseñó y seguir su ejemplo como el más preciado homenaje que le podamos brindar sus hijos, nietos, hermanos y demás familiares, conjuntamente con los que conformamos la gran familia de LA LIBERTAD.