*Desconocidos llegaron hasta un billar de la vereda Oropoma y abrieron fuego contra los jóvenes que se hallaban en el sitio, resultando también 5 personas heridas.
La masacre registrada en Ábrego, Norte de Santander, era la crónica de una muerte anunciada, teniendo en cuenta la alerta temprana de la Defensoría del Pueblo que expuso el riesgo en el que viven los habitantes en esa zona del Catatumbo por la disputa territorial entre grupos Insurgentes.
En la vereda Oropoma, del municipio de Ábrego, fue epicentro de una nueva masacre en el país. Allí 11 jóvenes residentes en esa vereda de Norte de Santander fueron atacados a bala por desconocidos que llegaron hasta un billar ubicado en el sitio conocido como kilómetro 17.
La acción criminal e indiscriminada dejó cinco personas fallecidas y seis más heridas que reciben atención médica en centros asistenciales.
Los fallecidos fueron identificados como Winston Prada Puentes, Heimer Ortiz Ballesteros, José Luis Vega Plata, Jesús Alberto Vega y Robinson Garay Barbosa. Todos ellos, según testimonios de la comunidad, se dedicaban a la agricultura y tenían parcelas con cosechas de tomate y cebolla.
A Ocaña llegó el ministro de la Defensa, Diego Molano , para reunirse con altos mandos militares y analizar lo sucedido para tomar medidas que garanticen la no repetición de estos casos.
Se informó que defensores de derechos humanos han rechazado la masacre y manifestaron que era la crónica de una muerte anunciada, pues una alerta temprana de la Defensoría del Pueblo expuso el riesgo en el que viven los habitantes en esa zona del Catatumbo por la disputa territorial entre grupos Insurgentes.