El coronavirus y la economía colombiana

Por: Jorge Vergara Carbó
Las cifras recientes del FMI y del banco Mundial sobre el crecimiento económico para este año, son desalentadoras ambas proyectan una recesión mundial alrededor del menos3%, para América latina el menos 5.2%, y para Colombia el menos 2.4%. El Banco Mundial estima para nuestro país, un comportamiento de menos 2%. Todo por el efecto del Coronavirus 19, que ante la carencia de vacuna, la única forma que se ha encontrado para evitar los contagios es estar en cuarentena, lo que implica paralizar en parte el aparato productivo.
Lo que preocupa, es que no sabemos cuándo se reactivara el aparato productivo en el Mundo y en nuestro país. El presidente Duque, está pensando presionado por los gremios que a partir del 27 de abril, 35 sectores económicos normalicen sus actividades e igualmente otros países están pensando lo mismo.
A Colombia, esta crisis la cogió casi en las mismas circunstancias de la depresión de 1.929-1.932, donde los precios del café, nuestro producto base de exportación bajo de precio y el resto de exportaciones cayeron ante la falta de demanda. La del 2020, nos sorprende con una caída del precio del petróleo, producto de varias cosas: sobre oferta mundial, diferencias entre Rusia y Arabia Saudita y por supuesto caída de la demanda, lo que llevo el petróleo Brent a unos US$25, el barril, y el precio del carbón alrededor de los US$50 tonelada, una caída en las Remesas producto de la pérdida de empleo en los Estados Unidos y Europa. Además con un déficit fiscal del orden del 2.5% del PIB, y un déficit en cuenta corriente del 4.6%, del PIB, con un endeudamiento externo del 51.2%, del PIB, con un desempleo del 13%, y una informalidad del 47%.
A lo anterior tendríamos que agregar, que nuestro sistema de salud privatizado y oficial no estaba preparado para afrontar esta pandemia, lo que por supuesto implicaba que el gobierno centrara todos sus esfuerzos en reforzar los presupuestos de salud, para que contaran con los equipos necesarios para realizar las pruebas , como los respiradores necesarios.
Pero también se hacía necesario; 1) ayudar a los desprotegidos y en especial a quienes viven del rebusque, porque no tienen estando en cuarentena la mínima posibilidad de obtener un ingreso. 2) sostener el empleo especialmente de las Mipynes , y 3) darle liquidez al sistema bancario.
Son diversas las medidas que ha tomado el gobierno, para cumplir lo anterior, una de ellas, es la de adelantar la plata de los programas asistenciales del Estado, devolverles el IVA a los estartos1 y 2, entregarles con apoyo de las entidades territoriales ayudas alimentarias.
Constituir un fondo”FOME” por $14.8 billones, de los recursos del FONPET y del FAE, para darle liquidez al sistema financiero y al sector empresarial privado, oficial o mixto. Por parte del Banco de la República se bajaron las tasas de interés al 3.75%, y se disminuyeron los encajes de ciertos papeles, se le solicito al FMI, un préstamo transitorio por dos (2) años, por US$11.000 millones, para darle liquidez al sistema financiero y apoyar a las clases más necesitadas.
A nuestro juicio, el gobierno está dando muchas vueltas para disminuir la recesión que vaticinan el FMI y el Banco Mundial, e incluso las medidas que ha tomado para financiar a las Mipynes, no está funcionando porque Bancoldex y el sector bancario están poniendo muchas trabas en especial al pequeño empresario, como nos lo han manifestado varios de ellos, ubicados en el corredor universitario, y como lo expresó, en el periódico El Tiempo el director de Fenalco.
La realidad es que cada día que pasa, son más los empleos que se pierden y de acuerdo a la Andi las compañías solo tiene caja para 53 días.
De acuerdo a lo anterior, nos permitimos recomendarle al gobierno lo siguiente:
1. Replantear el Plan de Desarrollo Nacional al igual que los planes de desarrollo territorial que se están elaborando para afrontar sin penurias la crisis que vivimos.
2. Olvidarse de la Regla Fiscal, no la hemos cumplido desde que se creó.
3. Solicitar un crédito al Banco de la República por lo menos de $50 billones, orientado a subsidiar el pago de la nómina de las empresas vinculadas al sector turismo, como al pequeño y mediano empresario para que mantengan el empleo, y a los trabajadores informales garantizándoles un ingreso mínimo de subsistencia.
4. Disminuir los días de fiesta de 18 a 10 días, manteniendo la Ley Emiliani. No podemos seguir siendo el número uno.
5. Proponer una reforma tributaria que elimine todas las exenciones y deducciones, y que grave con un porcentaje igual o superior al 10%, a los que tengan un patrimonio igual o superior a los $5.000 millones, orientada a corregir la mala distribución del ingreso que tenemos.
6. Olvidarnos del petróleo y el carbón, tenemos que buscar alternativas de desarrollo industrial que se estructuren pensando más en el mundo que satisfacer el mercado interno, de tal forma que sea capaz conjuntamente con el desarrollo de la agroindustria y la agricultura de generar las divisas necesarias para lograr un crecimiento estable de la economía y podemos ir disminuyendo las diferencias sociales .Hay que gravar la tierra improductiva en el campo y acabar con el mal uso de la misma.
7. Por último decirle al gobierno que el sector que está siendo golpeado por esta crisis, son los medios de comunicación como el periódico La Libertad, que tiene que pagar sus empleados y sus servicios, a pesar de las limitaciones para vender el periódico, y la disminución de la pauta.
No hay otra, el endeudamiento externo e interno tenemos que pagarlo, y la única forma es generando ingresos. Estos se obtienen de dos formas: por los impuestos que se cobran , por las utilidades de las empresas del Estado y por la venta de activos.
El camino que nos queda es elaborar una reforma tributaria que le permita al país, recaudar por lo menos el 34.2% del PIB, que es el recaudo promedio de la OCDE hoy solo recaudamos entre el 18.8%. EEUU, recauda el 35.1%, y Alemania el 41.3%.
Si la clase dirigente del país, no aprovecha esta coyuntura para hacer las reformas que se necesitan, significa que no aprendimos la lección que nos debe dejar el coronavirus.
No hay de otra, o cambiamos o nos cambian
#DIARIOLALIBERTAD
dawad