Un joven nacido en Barranquilla, pero de origen ruso, que había regresado de ese país el sábado pasado luego de permanecer allí 6 meses fue el protagonista de una intensa balacera el domingo a las 12 de la noche en la carrera 46 con la calle 89, barrio La Campiña.
Carmal Ilich Nadjar Vetashev, de 22 años, quien tiene las dos nacionalidades, rusa y colombiana, parece había estado libando licor desde las primeras horas de la noche y a las 11:40 del domingo les dijo a unos amigos que iba hacerle daño a una o dos personas que no les agradaba para nada y fue así como inicialmente hizo varios disparos con una pistola en dirección a un edificio que se levanta en la calle 88 con la carrera 44.
Parece que una de las personas a la que le quería hacer daño era un joven domiciliario que siempre presta servicios en ese sector de nombre Wulisleduin Piña Sarabia, de nacionalidad venezolana y quien recibió un tiro en el maxilar inferior, quedando tendido en el pavimento. Esta persona había llevado a un apartamento un encargo.
Cerca del lugar transitaba una patrulla del cuadrante y al escuchar las detonaciones acudió al lugar y observaron cuando una persona corría con dirección a la carrera 46, presentándose en ese momento una intensa balacera, donde el joven ruso comenzó a dispararles a los policiales y estos repelieron la acción. Ya casi en esa dirección el joven cayó al pavimento, al tiempo que dos de los agentes que perseguían al individuo también recibieron heridas de bala en sus piernas.
Se informó que el joven ruso recibió una herida en el costado derecho, en uno de los brazos y la pierna izquierda. Otra patrulla con la ayuda de una ambulancia lo trasladaron hasta la Clínica San Vicente, donde se encuentra internado y bajo vigilancia policial, ya que aparece como detenido y cuando los médicos ordenen su salida será llevado a la URI de la Fiscalía, para luego quedar a disposición de un juez de control de garantías, donde se le legalizarán la captura y la formulación de cargos, por los delitos de tentativa de homicidio, lesiones personales y porte ilegal de arma de fuego.
Los patrulleros de la Policía que resultaron heridos, uno de ellos presenta el balazo en la pierna derecha, al igual que el segundo y se encuentran internados en el mismo centro asistencial.

Aficionado a las armas
Ayer se conoció, no solamente por parte de las autoridades, sino de amigos cercanos, que este joven es aficionado a las armas, tanto de largo como de corto alcance. En muchas fotografías que tiene se le ve con subametralladoras, fusiles AK, pistolas 9 milímetros y revólveres.
Otro hecho que no tuvieron en cuenta las autoridades sanitarias del Distrito de Barranquilla, es que esta persona había llegado el sábado procedente de Rusia, donde en este momento la pandemia del Coronavirus está afectando a los habitantes de ese país y era necesario que este muchacho le hubieran hecho los exámenes cuando llegó al aeropuerto Ernesto Cortissoz, para establecer si estaba infectado.
Qué dijo el comandante operativo
El comandante operativo de la Policía Metropolitana de Barranquilla, Yecid Peña, en relación a esta balacera que se presentó el domingo por la noche hizo su pronunciamiento sobre el particular, manifestando: “Podemos decir que a las 23 horas del domingo, la Policía conoce un hecho en el norte de la ciudad, en donde un repartidor de domicilios manifiesta que estaba haciendo entrega de unos elementos a un grupo de jóvenes que pidieron ese servicio, cuando una persona sin mediar palabra alguna esgrime un arma de fuego y comienza a disparar y es entonces así como el policía que se encuentra de servicio en el CAI Venezuela junto con la patrulla del cuadrante que llega reaccionan a raíz que este ciudadano emprende un ataque con arma de fuego hacia la patrulla policial y el comandante de la Estación que se encontraba allí. En ese momento resultan lesionados los dos policías y usando las armas del Estado también es herido el individuo antes mencionado y son llevados al centro asistencial”.
El oficial de la misma manera manifestó que el sujeto colombo-ruso no tiene antecedentes y sí se le incautó una pistola, marca Tauros 7.65 con la cual hirió a los uniformados y al domiciliario.
Se estableció de la misma manera que el joven del domicilio vive en Soledad y trabaja en un local de comidas rápidas cerca al lugar y manifiesta que no tiene problemas, pero es probable que al joven ruso como que no era de su agrado, razón por la cual se inició el tiroteo.
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